Reportaje

Crecer con más seguridad

Una decena de colegios participan en un programa educativo que fomenta la cultura preventiva en los escolares

‘Segurito’ es la mascota de referencia para el alumnado

Autoridades, profesores y alumnos en una de las actividades para fomentar la seguridad vial.

Autoridades, profesores y alumnos en una de las actividades para fomentar la seguridad vial. / CÓRDOBA

Víctor R.H.

Aprende a crecer con seguridad es una iniciativa pedagógica que este curso cumple 30 años. Se inició en 1994 en Jaén y desde 2003 se desarrolla en toda Andalucía con el objetivo de fomentar el valor de la prevención de riesgos laborales en la comunidad educativa. La campaña se basa en el valor de la formación y la concienciación sobre los riesgos desde edades tempranas para evitar los accidentes.

Este proyecto, dirigido a los centros de Primaria, se desarrolla a través de las consejerías de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo y de Desarrollo Educativo y FP, e introduce la cultura preventiva en la escuela.

En Córdoba están participando unos 900 escolares de una decena de colegios. Tres son de la capital y el resto, de la provincia: Santaella (donde comenzó la campaña) Adamuz, BaenaBujalanceEspielPeñarroya-Pueblonuevo y Montilla (donde acaba).

«Esta cifra de participación es muy superior a las de años atrás, donde la media estaba en los 500 niños», indica la organización.

El alumnado participante es preferentemente de 5º de Primaria, si bien en algunos colegios de una sola línea se abre a 4º y 6º. «La elección de la edad se debe a que, estadísticamente, es entre los 10 y 11 años cuando ocurren más accidentes», añade.

5º de Primaria es el nivel elegido ya que, por estadística, en 10 y 11 años es cuando hay más accidentes

Es un programa de sensibilización escolar que intenta inculcar en la escuela la cultura de la prevención de riesgos laborales a los niños y niñas desde sus entornos más cercanos con el objeto de concienciarlos sobre la forma de prevenir conductas de riesgo que puedan tener como resultado un accidente, al tiempo que se educa a los futuros trabajadores

A los escolares se les hace entrega de material adaptado y la campaña tiene un logotipo (dibujo) denominado Segurito que se convierte en una especie de mascota o punto de referencia para ellos. También se desarrolla un juego de identificación de riesgos en el que toman parte. «La idea surge como consecuencia del claro problema educacional y preventivo en la sociedad, con índices de accidentes laborales e infantiles de los más altos de la UE; y que se quiere atajar, además, educando a niños y niñas, nuestras futuras personas trabajadoras». Los objetivos principales de la campaña son concienciar sobre los accidentes a toda la comunidad educativa; integrar a toda la sociedad en la cultura preventiva; reducir los accidentes infantiles y, en un futuro, los accidentes y enfermedades de carácter laboral.

Es importante resaltar la labor decisiva del personal docente, que hace posible que tal cultura preventiva cale en la sociedad cordobesa y andaluza desde la infancia.

Los informes de valoración tras las campañas afirman que los niños que han tomado parte presentan una disminución en la tasa de accidentes, así como que aumentan los conocimientos de los jóvenes sobre las situaciones de riesgo y forma de prevenirlas.