Poner a prueba los conocimientos de química inorgánica con un juego

La profesora de la Universidad de Córdoba (UCO) Mercedes Sánchez coordina el proyecto Uso de videojuegos como herramienta de aprendizaje en química inorgánica. El proyecto, en el que participa profesorado del Departamento de Química Inorgánica e Ingeniería Química de la Universidad de Córdoba, «propone el desarrollo de un videojuego basado en los contenidos teórico/prácticos impartidos en asignaturas de Química Inorgánica del Grado de Química», apunta Sánchez, quien puntualiza que «tiene como objetivo que el alumnado repase de forma amena los principales conceptos de las asignaturas, pudiendo realizar la actividad tanto en solitario como en equipo».

Los beneficios de la gamificación están más que reconocidos, pues es una de las metodologías innovadoras con más trayectoria.

«Para el desarrollo del videojuego se ha seleccionado la Nintendo Switch, que permite la creación sencilla de videojuegos mediante el uso del juego Estudio de videojuegos», explica la profesora Sánchez.

En este sentido, «el desarrollo y aplicación de un videojuego aplicado a los contenidos de las asignaturas de Química Inorgánica beneficiará a los distintos actores involucrados», dice la responsable del proyecto que resalta que «el profesorado realiza una labor de revisión y adaptación de contenidos al formato del videojuego, lo que le permite plantearse los contenidos de las asignaturas desde otro punto de vista, al tiempo que le exige seleccionar los contenidos más relevantes para su aplicación en el videojuego».

Por otra parte, «el alumnado dispondrá de una nueva herramienta para la revisión de los contenidos principales de la asignatura, que se espera sea un incentivo adicional para hacer más amenos los contenidos de la asignatura y fomentar el trabajo en equipo y el autoaprendizaje del alumnado», subraya Mercedes Sánchez.

Tres etapas

El proyecto se desarrolla en tres etapas principales: una primera de reuniones de trabajo del profesorado para definir los contenidos que se aplicarán en el videojuego así como para proponer una primera versión del juego.

La segunda etapa será la de desarrollo del videojuego, terminando con una puesta en común y prueba por parte del profesorado. «La última etapa, a final de curso, será la implementación del videojuego, utilizándolo con el alumnado en el aula, en alguna clase de grupo mediano o pequeño», concluye la responsable del proyecto de innovación docente con el que se busca también incrementar la incorporación de las tecnologías aplicadas a la enseñanza.