LA PASIÓN EN CÓRDOBA

Cuatro siglos de arte cofrade en un ciclo singular

La antigüedad y el valor artístico de las imágenes y grupos escultóricos que procesionan en La Rambla, con ocho obras de sus quince pasos con más de tres siglos de historia, dan cuenta de la calidad única de una Semana Santa que tiene como referente el Nazareno que tallara Juan de Mesa

JUEVES SANTO, HERMANDAD DE LA HUMILDAD.  UNA IMAGEN DEL CONJUNTO DE LAS ANGUSTIAS, OBRA DE ENRIQUE RUIZ FLORES. | CÓRDOBA

JUEVES SANTO, HERMANDAD DE LA HUMILDAD. UNA IMAGEN DEL CONJUNTO DE LAS ANGUSTIAS, OBRA DE ENRIQUE RUIZ FLORES. | CÓRDOBA / JUAN M. NIZA La Rambla

Juan M. Niza

Juan M. Niza

La Semana Santa de La Rambla 2023 viene marcada por los ecos del 400 aniversario de la llegada a la localidad de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, obra que materializó el escultor cordobés Juan de Mesa y Velasco apenas un año después de tallar el Gran Poder de Sevilla. Se trató de un acontecimiento el año pasado que supuso un revulsivo para el sentir cofrade de La Rambla y para la localidad en general. Un programa conmemorativo que, justo en unos momentos duros en donde las cofradías sufrían las consecuencias de las restricciones por la pasada pandemia, sirvió para reimpulsar la actividad de las hermandades, con la cofradía de Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Amargura a la cabeza, además de constituir todo un motivo de orgullo y de autoafirmación local, mucho más allá del ámbito cofrade.

De hecho, la celebración del año jubilar que decretó la Santa Sede para conmemorar el aniversario se ha extendido hasta 2023, concretamente al 6 de enero, hace relativamente poco, fecha en la que el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, clausuró la Puerta Santa del templo jubilar del Espíritu Santo, junto a la entrada del vecino convento de la comunidad de hermanas de María Stella Matutina.

VIERNES SANTO, LA EXPIRACIÓN  CRISTO DE LA EXPIRACIÓN, TALLA ANÓNIMA DEL SIGLO XVII.

VIERNES SANTO, LA EXPIRACIÓN. CRISTO DE LA EXPIRACIÓN, TALLA ANÓNIMA DEL SIGLO XVII.

Un ciclo de conferencias de alto nivel y una peregrinación colectiva organizada a Roma fueron algunos de los eventos y programas que completaron el año jubilar, junto a días grandes como el vía crucis del 4 de marzo de traslado a la iglesia de La Asunción para un septenario extraordinario, coincidiendo justo con los cuatro siglos de la llegada de la imagen a La Rambla. Aquella fecha señalada sirvió también para lucir las andas primigenias de la hermandad, la extraordinaria túnica recién restaurada de 1776, esa cruz de plata singular de 1724 de orfebres de Córdoba de Vera Cruz (México) o el cíngulo del siglo XIX.

Sin embargo, y hablando ya de la Semana Santa 2023, no faltan en La Rambla atractivos más allá del Nazareno de Juan de Mesa. De hecho, basta con recordar que, a tenor de la población actual de La Rambla, el número de imágenes de entre tres y cuatro siglos que procesionan, ocho tallas que en conjunto suman unos tres milenios de historia, nos daría el mayor ratio de Córdoba y quizá de Andalucía de imágenes históricas cofrades por habitante. Todo ello, fruto del esplendor que vivió La Rambla entre las localidades del entorno a principios del siglo XV, al beneficiarse de los cambios socioeconómicos y comerciales tras la conquista del reino de Granada.

Desde el Domingo de Ramos

Así que, más que seguir un criterio artístico, devocional o histórico, quizá no haya mejor forma de contar la Semana Santa de La Rambla, y de animar al visitante a disfrutar también de ella, que siguiendo el orden de salida de las distintas corporaciones de la localidad. Todo ello en un ciclo que este 2 de abril, Domingo de Ramos, vuelve a arrancar desde la iglesia de la Santísima Trinidad a cargo de la hermandad de la Entrada Triunfal. La corporación fue en su día filial de La Expiración y el año pasado cumplió medio siglo de existencia, con 420 hermanos (más de uno de cada 20 rambleños pertenece a la cofradía) que recogen una historia mucho más antigua que su fundación, como atestigua la Virgen del Rosario, anónimo de finales del siglo XVI o principios del XVII. Nuestra Señora del Rosario, titular letífica de la hermandad, es el primero de los hitos devocionales en procesionar en La Rambla cada Semana Santa, cargada de promesas y de peticiones y hasta con un milagro reconocido canónicamente. La siempre querida imagen de Jesús a lomos de la borriquita es obra de José Traite (1973), mientras que el misterio procede del taller de Arte Cristiano de Olot.

MIÉRCOLES SANTO, LA ESPERANZA   NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA, DE VENANCIO MARCOS.

MIÉRCOLES SANTO, LA ESPERANZA. NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA, DE VENANCIO MARCOS.

En el Lunes Santo toma el relevo la Oración en el Huerto, fundada en 1997 formalmente, aunque también heredera de siglos de historia anterior. En La Rambla hay pocas cosas viejas aunque todo venga de antiguo, como el legado que dejó desde el siglo XIX la cofradía de la Inmaculada Concepción, patrona de La Rambla. El Señor de la Oración y el Ángel es obra de Enrique Ruiz Flores, tallados entre 1999 y 2001, y, cinco años después, la Virgen y San Juan, en el segundo paso, obras de Luis Sergio Torres Romero. La procesión sale de la iglesia de La Asunción, aunque la hermandad tiene su sede en la ermita de la Inmaculada.

Un horario similar, de 21.30 a algo después de medianoche, tiene el Martes Santo la cofradía de nazarenos de La Caridad, el Santísimo Cristo de los Remedios y María Santísima de la Merced, conocida por una intensa obra social. El caminar del Cristo de los Remedios (anónimo de finales del siglo XVII) a hombros de hermanos sobrecoge por las estrechas calles de La Rambla con el único acompañamiento de dos tambores roncos, que evocan a aquellos tambores que acompañaban a los reos.

El Miércoles Santo, la hermandad de La Esperanza, que el pasado año cumplió un siglo desde su fundación, hace valer también el legado de corporaciones anteriores, remontándose sus raíces hasta la más antigua de La Rambla: la del Cristo de la Vera Cruz. Así, el Miércoles Santo ofrece en La Rambla la posibilidad de admirar cuatro siglos de arte cofrade que van desde el Cristo de la Vera Cruz, portada a hombros por tres hermanos y que es la imagen más antigua de La Rambla, de autor desconocido y datada a mediados del siglo XVI; hasta la obra del misterio, realizada por Francisco Romero Zafra (1992) en madera de cedro, en un paso que diseñó el artista sevillano Juan Antonio Camacho Vega. Y todo ello hasta llegar al paso de palio de orfebrería de Angulo (Lucena), restaurada y enriquecida por Talleres Lama (Córdoba), con la imagen la Virgen de La Esperanza, de Venancio Marco Roch, el insigne imaginero valenciano de principios del XX.

SÁBADO DE GLORIA, LA SOLEDAD   PASO DE NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD, OBRA DE VENANCIO MARCOS.

SÁBADO DE GLORIA, LA SOLEDAD. PASO DE NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD, OBRA DE VENANCIO MARCOS.

El Jueves Santo, la hermandad de La Humildad, que sale de la ermita del Calvario y se fundó en 1976, es otro caso de corporación moderna, al menos para el estándar de La Rambla, ya que se acerca al medio siglo de vida y, como otras tantas cofradías citadas, recoge legados del pasado, como los de aquella hermandad de La Pasión. De nuevo, las profundísimas raíces cofrades rambleñas permiten admirar obras de arte cofrade con siglos. Casi cuatro siglos, 399 años para ser precisos, entre la talla del Ecce Homo, atribuido a Juan de Mesa el Mozo, quizá de 1601 (la talla del paso es del artista rambleño Sebastián Salado Ruiz) y el grupo de María Santísima de las Angustias y el Santísimo Cristo de la Misericordia, del cordobés Enrique Ruiz Flores (año 2000). Se trata de una maravilla de la imaginería contemporánea y que ahora sucede a otras tallas que fueron titulares de la hermandad y a las que no les faltaba mérito, como una Virgen del siglo XIX de la misma advocación. Otra singularidad: el paso de Las Angustias es el único de la Semana Santa de La Rambla portado por costaleras.

Una ‘madrugá’ del Nazareno

Llegado el Viernes Santo, la Semana Santa rambleña vive con intensidad la Madrugá. Apenas cinco horas después de que la cofradía de La Humildad regrese a la ermita del Calvario, a las 4 de la madrugada sale de la iglesia del Espíritu Santo el Jesús Nazareno que tallara Juan de Mesa. El Señor de La Rambla, alcalde honorífico de la localidad (el nombramiento se hizo coincidir con la celebración en 2022 del año jubilar con motivo 400 aniversario de la llegada de la talla a la localidad) copa las promesas de creyentes desde hace siglos, todo ello sobre el impresionante paso del sevillano Manuel Guzmán Bejarano, con candelabros de guardabrisas de Camacho Vega y que fue dorado y policromado por Cristóbal Cubero en Priego.

Detrás, el paso de Nuestra Señora de la Amargura con San Juan Evangelista, que talló Francisco Romero Zafra en 1991 y 2006, respectivamente, cuenta también con hitos como la mesa metálica de Hermanos Aguado, bordados de Antonio Villar y orfebrería de los Hermanos Santos.

El cortejo procesional regresa con el sol en lo más alto, a las 13 horas, dando un respiro a La Rambla por la tarde antes de la salida de La Expiración desde el convento de la Santísima Trinidad.

LA SALIDA DESDE LA IGLESIA DEL ESPÍRITU SANTO DE NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO, OBRA DE JUAN DE MESA, MARCA LAS HORAS HASTA EL AMANECER EN LA RAMBLA

LA SALIDA DESDE LA IGLESIA DEL ESPÍRITU SANTO DE NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO, OBRA DE JUAN DE MESA, MARCA LAS HORAS HASTA EL AMANECER EN LA RAMBLA / MANUEL MURILLO

Esta otra corporación de Viernes Santo también tiene tallas anteriores a su propia fundación oficial, en 1719, con la imagen del Cristo de la Expiración, obra anónima del siglo XVII de la escuela sevillana atribuida al círculo de Juan de Mesa, y la Virgen de los Dolores en un segundo paso, del mismo siglo y también de autor anónimo rescatada en su día de la antigua ermita de la calle de La Trinidad.

Por su parte, el Sábado de Gloria da el protagonismo a la hermandad del Santísimo Cristo Yacente y La Soledad, fundada en 1738 y con una amplísima historia de anexiones y refundaciones (la más reciente, en 1974) y con una imagen que nos llega desde sus orígenes, el Cristo Yacente, de finales del siglo XVI, mientras que la Virgen de la Soledad es obra del valenciano Venancio Marcos, que también talló la Esperanza de La Rambla hace un siglo.

Por último, el Domingo de Resurrección es la propia Agrupación de Hermandades de La Rambla la que procesiona desde la ermita de San José al Resucitado, obra de Miguel Arjona Navarro (1997), en un cortejo con una representación de tres hermanos por cada una de las cofradías rambleñas y sin hábitos.

El gesto personifica la unión y la fuerza de estas corporaciones, artífices de una Semana Santa singular en Córdoba y repleta de hitos artísticos e históricos como pocas en Andalucía.

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