proyecto piloto con entidades del tercer sector
Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Córdoba se alían para reducir el absentismo escolar
La iniciativa se está realizando en los barrios de Moreras, Palmeras y Sector Sur de la capital
Las acciones van dirigidas al alumnado de 6 a 16 años y también incluyen a sus familias
Víctor R.H.
Un proyecto socioeducativo se está desarrollando en Córdoba para contribuir a reducir el absentismo escolar en tres barrios desfavorecidos de la capital, como son los de Moreras, Palmeras y Sector Sur. Se trata de una iniciativa de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de Córdoba, que cuenta con el apoyo de fondos Next Generation de la UE, y que en Córdoba está permitiendo trabajar con familias y menores de las zonas más vulnerables.
Conocido como plan POPI, el proyecto se denomina Estrategias y acciones en zonas desfavorecidas de Andalucía que apoyan y mejoran los procesos de inclusión sociofamiliar en familias con menores en situación de absentismo y fracaso escolar y en dicha actuación están participando entidades del tercer sector, a través de un convenio de algo más de 250.000 euros.
En concreto, en el Distrito Sur está actuando la Fundación Don Bosco Salesianos Social; en Moreras, CIC Batá, y en Palmeras, Estrella Azahara, todas ellas entidades sin ánimo de lucro con dilatada experiencia en el ámbito educativo y social, sobre todo con menores, y conocedoras de los barrios.
Beneficiarios
El fin principal que persiguen es apoyar y mejorar los procesos de inclusión en familias con hijos, con edades comprendidas entre los 6 y 16 años, en situación de riesgo de absentismo y fracaso escolar, así como ayudar a estas mismas familias que se encuentren en situación de vulnerabilidad o exclusión social. Hasta el momento, han incidido sobre 51 familias y 80 menores repartidos en los tres barrios. Las asociaciones iniciaron su trabajo en junio en estas zonas de transformación social. Bajo la fórmula de escuelas de verano, atendieron labores de refuerzo educativo y de fomento de aspectos como la inteligencia emocional.
El equipo de trabajo está formado por profesionales de estas entidades sociales y cuenta con una coordinación continua con los equipos de acompañamiento familiar, incorporados al Ayuntamiento de Córdoba, que han diseñado los itinerarios de las familias seleccionadas. «Es una iniciativa novedosa que está ayudando a la mejora de la inclusión sociofamiliar, con la adquisición de competencias personales y sociales», explica Elena Balongo, educadora de la Fundación Don Bosco y coordinadora del plan POPI en Córdoba.
El proyecto comprende varias líneas de actuación, favoreciendo la capacitación maternal/paternal positiva de las familias; el desarrollo de actuaciones grupales con menores (adquisición de las competencias claves, emocionales y académicas, en Lengua y Matemáticas); y actuaciones con personas adultas (capacitación digital y disminución de la brecha digital).
Según Claudia Usuga, de CIC Batá, «todas las familias que están participando activamente en el estudio están completando el mínimo itinerario que se marcaba».
Por su parte, Ángela Díaz, de Estrella Azahara, expone que se está «fortaleciendo el trabajo colaborativo y se están logrando hacer seguimientos individuales a menores y progenitores». Las conclusiones del estudio se presentarán antes de final de año y, en estos meses, también se está contando con participación de los centros educativos de la zona.
Elena Balongo apuesta por el trabajo en red entre los diversos agentes educativos, por actuaciones de prevención y de intervención integral con las unidades familiares y por facilitar recursos cercanos de acompañamiento familiar y apoyo educativo para lograr su inclusión.
[object Object]Claudia Usuga aboga por un apoyo continuado a las familias, desde el bienestar personal y familiar. Todo ello para propiciar la reflexión, el autoconocimiento y el fortalecimiento de las capacidades, potencialidades, gestión emocional y apropiación de los recursos de la zona y de la ciudad.
[object Object]Ángela Díaz considera que se debe luchar desde los centros educativos por medidas de acompañamiento e intervención con estos menores; formación integral y de calidad para el profesorado y por programas de ayuda y mejora para este alumnado y de FP dentro del distrito.
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