Una Navidad más humana

La Navidad de consumo y exceso llega a los hogares a través de la publicidad y el comercio. No obstante, la inmensa mayoría de escuelas ‘compensan’ esos mensajes con otros mucho más educativos, fundamentados en valores como la bondad, el compañerismo, la amistad o la familia.

A estas características, los colegios religiosos suman un plus de espiritualidad y humanidad con el que impregnan aulas y toda la vida escolar en diciembre.

Estos centros, como el resto, acogen a las familias que, junto a docentes y estudiantes, decoran las clases, pasillos y demás espacios, y los dotan de «mensaje» para celebrar estas fiestas.

Y el belén es un elemento central ahí. El director del Virgen del Carmen (Carmelitas), Fernando Donaire, explica que el suyo tiene un valor extra, ya que está construido y pintado por los alumnos del aula EBE (Aula Básica Especial). «Son siete alumnos de diversidad funcional que se encargan de realizar esta importante construcción navideña».

El montaje del belén también es un clásico en el Colegio Cervantes (Maristas). «Nuestro colegio ya está vestido de gala para ambientar nuestros corazones, empezando por nuestro mítico belén del vestíbulo, que animamos a que lo visite todo el mundo», señala Ana González Galo, responsable de Pastoral.

Según Galo, Maristas está inmerso en el camino hacia la Navidad, una aventura de aprender a «sonreír coNrazón». Quieren ser conscientes «de la importancia de este tiempo viviendo la acogida del niño Jesús, reflexionando, valorando las muchas razones para estar felices, sintiéndonos con el corazón lleno y plenamente agradecidos».

Moisés López Mata, orientador y tutor de Primaria del Sagrado Corazón (Esclavas de Jesús), habla de su celebración espiritual y humana. «Nuestra oración de la mañana, con sesiones de interioridad, transmiten ese sentido cristiano a esta época desde el primer domingo de Adviento». Muchos centros añaden «retos diarios» para trabajar y prepararse personalmente.

Otros, como La Salle, cultivan la fraternidad. En línea con su lema ‘Juntos Mejor’, sus comunidades educativas de Andújar, Estrella Azahara y Córdoba han celebrado un Retiro de Adviento en el centro cordobés. «Ha sido una jornada de recogimiento y reflexión, dirigida por el H. Ángel Menacho, de la Comunidad Intercongregacional de Loja, y centrada en la familia lasaliana», transmiten.

El objetivo general es no dejarse ‘cegar’ por tantas luces; tomar perspectiva aterrizar en un escenario más humilde.

Así, la habitual colaboración con entidades sociales se intensifica. Las Esclavas recogen juguetes, nuevos, para tener la ilusión de «estrenarlos». Todos se donan a la asociación Red 21, que trabaja en Las Palmeras, y a un grupo de voluntarios de la parroquia Virgen del Camino, cuyo radio de acción es el Barrio Guadalquivir, Adoratrices, el proyecto Don Bosco y algunos asentamientos rumanos.

También acompañan a mayores, visitando rutas de belenes y dan regalos a tres residencias de Cáritas. «Cada año podemos lograr unos 130 regalos gracias al apoyo de profesores, alumnado y familias», explica López Mata.

Igualmente, estos centros se suman a la recogida de alimentos, un ‘clásico’ dentro de las campañas solidarias navideñas. En el Virgen del Carmen suelen desarrollar la ‘Operación Kilo’, si bien este año Cáritas les ha pedido una colecta. «Vamos a hacer vales para que familias puedan desayunar, comer o cenar; tienen diferentes precios en venta para que los alumnos, claustro y docentes los compren y ayuden».

En el Sagrado Corazón adquieren distintos alimentos por clases y niveles, e incluyen en la recogida productos de aseo y de limpieza. La entrega la realizan a varias asociaciones locales, especialmente a la casa de acogida Hogar Nazaret y al comedor de los Trinitarios.

Maristas Cervantes ha comenzado la «gran Campaña de Navidad», que moviliza al colegio. Cada clase tiene un reto solidario: recogida de alimentos para familias, guantes y gorros para quien vive en la calle, dinero para cestas de navidad, compra de regalos para ayudar a los reyes magos y tres proyectos específicos para familias del barrio que necesitan mejorar muebles de sus casas.

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