Aforismos de Benjamin Franklin

En este ‘Almanaque del Pobre Richard’, acertadamente rebautizado como ‘Aforismos del pobre Richard’, encontramos un testimonio de ingenio y sabiduría, marcado por ese constante espíritu de superación personal que se asocia a la cultura estadounidense. Escrito por Benjamin Franklin (1706-1790), uno de los fundadores de la patria, esta colección de aforismos, consejos y pronósticos cautivó a los lectores cuando se estrenó por primera vez en 1732. Qué maravilla el trabajo realizado por Javier Recas en la edición y traducción de esta joya del patrimonio estadounidense. No en vano es uno de los grandes estudiosos del género breve en nuestro país. Su introducción ejerce de recibidor magnífico para entender y disfrutar la obra en su magnitud.

Escrito bajo el seudónimo de Richard Saunders durante un período crucial de la historia estadounidense, los aforismos encapsularon los ideales de industria, prudencia y virtud de su época, y trascendieron el momento histórico. El almanaque, publicado anualmente hasta 1758, contenía pronósticos del tiempo, datos astronómicos y calendarios, pero su auténtico brillo radicaba en el estilo distintivo de Franklin al impregnar consejos de sentido común con humor y erudición. Aforismos como «Él no posee riquezas, lo poseen a él», «El tiempo es un hierba que cura todas las enfermedades» o «Toda la humanidad está en deuda con el bondadoso», ofrecen una idea de la contemporaneidad de lo que en este libro se aconseja, porque los grandes temas, los clásicos, contienen un mensaje eterno y ajeno a modas.

La motivación de Franklin para crear el almanaque fue más allá de una aspiración literaria; su objetivo era educar y elevar a ese pueblo naciente al que tanto amaba. Como impresor, inventor y estadista, Franklin reconoció la importancia de la superación personal en la formación de una sociedad próspera. Creía en la accesibilidad del conocimiento y utilizó el almanaque como plataforma para difundir información práctica al hombre común, abogando por una vida de laboriosidad y virtud. Sus frases concisas, ingeniosas y a menudo paradójicas animan a los lectores a reflexionar sobre las complejidades de la vida, aderezadas en ocasiones con un toque de humor. Esta mezcla de entretenimiento e iluminación no solo le valió popularidad al almanaque, sino que también le otorgó una influencia duradera en las letras estadounidenses. Hay espacio para la fe en el libro, con aforismos magníficos sobre la importancia de una creencia firme: «Cree en Dios y tus enemigos te temerán.»

Más de dos siglos después, los Aforismos del pobre Richard continúan siendo inspiradores y lúcidos. Su consejo atemporal, puesto ahora a disposición por la editorial Apeadero de aforistas, especialista en el género, ofrece un tesoro de sabiduría que sigue siendo tan pertinente en el siglo XXI como lo fue en el XVIII. Esta joya literaria continúa iluminando caminos hacia la prosperidad y el autodescubrimiento, demostrando que las buenas ideas resisten toda prueba del tiempo.

‘Aforismos del pobre Richard’

Autor: Benjamin Frankilin.

Edita: Cypress Asociación Cultural. Sevilla, 2023.

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