LA CONTRACRÓNICA

La contracrónica del Córdoba CF | Ración de dolor en la guarida del 'Shira'

Al equipo blanquiverde se le volvieron a aparecer sus viejos fantasmas en el Nuevo Mirador: una pifia y adiós

Los de Iván Ania se apuntaron un intento nulo en su primera ocasión de entrar en la zona de 'play off'

Algeciras-Córdoba. Las imágenes del partido en El Mirador.

Algeciras-Córdoba. Las imágenes del partido en El Mirador.

Francisco Merino

Francisco Merino

Cada partido, un mensaje. Al Córdoba CF se le volvieron a aparecer todos sus fantasmas en el Nuevo Mirador, donde encontró viejos traumas. Iba con el mantra del "portería a cero" y terminó encajando casi un autogol: Carlos García le dio, involuntaria y desafortunadamente, una asistencia a Iván Turrillo. El veterano jugador rojiblanco, claro está, le sacó el máximo partido a la pifia. Arriba, lo de casi siempre: un recital de situaciones de sí pero no, que prometen mucho pero acaban en nada. Marcó dos goles y los dos se los anularon por fuera de juego. El segundo, de Calderón, parecía legal. Quien quiera consolarse con eso, en su derecho está.

Los códigos indescifrables de la Liga

La Primera Federación es una categoría muy particular, que se mueve con códigos indescifrables. Se podía esperar un ambiente infernal en El Mirador, con oleadas de seguidores enfervorecidos ante un partido de lo más singular. Y sí, había personal en las gradas, pero con un entusiasmo contenido. La división solo existe desde hace dos cursos, pero ya ha dejado unas cuantas lecciones imprescindibles: cualquiera puede ganar a cualquiera en cualquier campo y los galones de los favoritos no son más que un adorno o un lastre.

Algeciras-Córdoba. Las imágenes del partido en El Mirador.

Algeciras-Córdoba. Las imágenes del partido en El Mirador. / LOF

Los protagonistas ya han visto lo suficiente para entender que venirse demasiado arriba cuando queda tanto por hacer es inyectarse presión. Cuando Simeone acuñó lo de "partido a partido" ofreció a sus colegas de profesión el argumento perfecto para salir del paso con elegancia después de un descalabro o un éxito. En Algeciras -un año peleando por subir a Segunda y otro por no bajar a la cuarta- lo saben y tratan de que nada les nuble la visión. Por más que los anfitriones marcharan invictos después de seis jornadas, situados en zona de 'play off' y cruzándose con un rival directo que, además, llegaba con un jefe al frente: Iván Ania, el hombre que dirigió a los del Campo de Gibraltar durante dos campañas completas. Había morbo y trascendencia. 

Al Córdoba, que había enlazado dos semanas sin marcar -y seis puntos amarrados-, le tocaba ponerse a prueba en un escenario complejo. Ania retocó la línea de ataque dando su primera titularidad a Toril como referente arriba, reservando en el banquillo a Casas. Atrás no tocó nada. Todo iba bien... hasta que dejó de ir. Carlos García se complicó la vida con un pase flojo hacia su portero que propició la entrada en escena de Iván Turrillo, un símbolo de la casa. Lleva desde los 17 en el primer equipo rojiblanco y tiene ya 34. Puede que le falten otras virtudes, pero le sobra oficio. Cogió la pelota y batió a Carlos Marín, dejando al joven central blanquiverde paralizado y con las manos en la cabeza. Y un 1-0 en el marcador, claro. Un obstáculo mayúsculo para un Córdoba al que lo de las remontadas no se le da bien. Esta vez tampoco.

Cuando en las gradas se escuchaban cánticos hirientes hacia Ania -lo de las visitas de los ex a un antiguo hogar tiene estas cosas-, el Córdoba rozó la reacción. Calderón se la sirvió desde la banda a Toril para que marcara, pero el lateral sevillano estaba en fuera de juego. Los blanquiverdes estaban negados en ataque, con la clásica colección de amagos sin pegada. Lolo Escobar sacó a un central, Admonio, para añadir más fuerza a su parapeto. Tenían algo que defender ante un Córdoba que iba contra corriente, pasándolo mal, sin soluciones.

Algeciras-Córdoba. Las imágenes del partido en El Mirador.

Algeciras-Córdoba. El CEO, Antonio Fernández Monterrubio, en el Nuevo Mirador. / LOF

Salieron Adilson, Kuki Zalazar, Antonio Casas... hasta Recio, redebutando después de un cuarto de hora en el primer partido. A Calderón le anularon un gol por un supuesto fuera de juego en el minuto 87, frustrando aún más a un Córdoba que se daba cabezazos contra el muro algecirista. Sacó Ania a todo lo que tenía. La primera tentativa de engancharse a la zona noble de la tabla, la de los cinco primeros, se quedó en en eso. Intento nulo. 

"Peor le va al Depor", le dirá alguien a algún cordobesista ofuscado tratando de aliviar su dolor. Y se llevará una mirada fulminante. El Córdoba nunca muere, pero su eterna agonía duele.

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