La Rambla: Un viaje por cuatro siglos de arte y devoción

La Semana Santa rambleña es un compendio de cultura, tradición, historia, patrimonio y, por supuesto, fe. Por no hablar de turismo, de la obra social de las cofradías o del mantenimiento de oficios de las artes sacras. Hablamos de un amplio recorrido a lo largo de 8 días desde los últimos cinco siglos con tallas, solo por citar algunas, como la del propio Juan de Mesa: la muy venerada imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno; la Virgen del Rosario (anónimo del siglo XVI); el Cristo de los Remedios (siglo XVII) o el Cristo de la Vera Cruz (mediados del siglo XVI) y que es la imagen más antigua que procesiona en la localidad.

Emblemáticas obras del barroco que se conjugan con exponentes de la mejor imaginería contemporánea, como por ejemplo, el Señor de la Oración y el Ángel, de Enrique Ruiz Flores, o la imagen de la Virgen, San Juan Evangelista y La Magdalena, obras de Francisco Romero Zafra, que acompañan al Nazareno en la Madrugá del Viernes Santo. Y todo ello sin olvidar la orfebrería, la talla, el bordado, la importante presencia y calidad de las bandas y agrupaciones musicales. Y, por supuesto, los estrenos de este año para ir enriqueciendo el patrimonio, según informa la Agrupación de Hermandades de La Rambla a través de su presidente, Antonio Raúl Raigón.

Pero empecemos cronológicamente para narrar ese ciclo cofrade que La Rambla muestra al mundo, comenzando con el 24 de marzo de 2024, Domingo de Ramos, y desde la iglesia de la Santísima Trinidad, con la que fuera hermandad filial de la Expiración desde noviembre de 1972 y que desde hace dos años, al cumplir medio siglo de existencia, ya es cofradía de pleno derecho tras un decreto del obispo, Demetrio Fernández. 

Orígenes

Las raíces de la corporación, sin embargo, se remontan a mucho antes, al incorporar la talla de la Virgen del Rosario, de finales del siglo XVI o principios del XVII y de autor desconocido. Nuestra Señora del Rosario, titular letífica de la hermandad, restaurada en 1986 por Martínez Cerrillo, es el primero de los hitos devocionales que salen a la calle en La Rambla cada Semana Santa, cargada de promesas y de peticiones y hasta con un milagro reconocido canónicamente. La siempre querida imagen de Jesús a lomos de la borriquita es obra de José Traite (1973) mientras que el misterio procede de los talleres de Arte Cristiano de Olot. La procesión irá acompañada este año por la agrupación musical Santísimo Cristo de la Expiración y, en el palio, por la Unión Musical Rambleña.

El Lunes Santo toma el relevo la hermandad de la Oración en el Huerto, fundada en 1997 formalmente, aunque también heredera de siglos de historia. El Señor de la Oración y el Ángel es obra de Enrique Ruiz Flores, tallados entre 1999 y 2001, y, cinco años después, la Virgen y San Juan, en el segundo paso, obras de Luis Sergio Torres Romero. La procesión sale de la iglesia de La Asunción, aunque la hermandad tiene su sede canónica en la ermita de la Inmaculada Concepción e irá acompañada de la agrupación musical de María Santísima de los Dolores El Rescate, de Linares. Este año estrena la finalización de la fase de carpintería y talla del canasto del paso de misterio y la primera fase de orfebrería del mismo, a cargo de la Ebanistería Enrique Luque (La Rambla), el tallista David Medina (Rota) y la orfebrería Oñate (Jerez). También estrenará el simpecado (diseñado y bordado por Antonio Raúl Taigón Nadales), dalmáticas, juego de ciriales y vara de pertiguero.

La cofradía de nazarenos de La Caridad, el Santísimo Cristo de los Remedios y María Santísima de la Merced, conocida por su intensa obra social y de caridad, obligada por sus estatutos de 1989, protagoniza el Martes Santo. El caminar del Cristo de los Remedios (obra anónima de finales del siglo XVII) a hombros de ocho hermanos sobrecoge por las estrechas calles de La Rambla con el único acompañamiento de dos tambores roncos, que evocan a aquellos que acompañaban a los reos.

El Miércoles Santo la hermandad de La Esperanza, que en 2022 cumplió un siglo desde su fundación, hace valer también el legado de corporaciones anteriores, remontándose hasta la más antigua de La Rambla: la del Cristo de la Vera Cruz. Una jornada en la que admirar cuatro siglos de arte cofrade que van desde el propio Cristo de la Vera Cruz, portado a hombros por tres hermanos y que es la imagen más antigua de La Rambla que procesiona, de autor desconocido (aunque hay quien la atribuye a La Roldana) y datada a mediados del siglo XVI, hasta la obra del misterio, realizada por Francisco Romero Zafra (1992) en madera de cedro. Y todo ello hasta llegar al paso de palio de orfebrería de Angulo (Lucena), restaurada y enriquecida por Talleres Lama (Córdoba), con la imagen la Virgen de La Esperanza, de Venancio Marco Roch, el insigne imaginero valenciano de principios del XX. Este año acompañará a la hermandad la banda de cornetas y tambores de Nuestra Señora de la Caridad (Vélez Málaga) y la banda de música Ciudad de Dos Hermanas.

Jueves Santo

El Jueves Santo La Humildad, que sale de la ermita del Calvario y se fundó en 1976, es otro caso de hermandad moderna para el estándar de La Rambla, ya que se trata de una corporación que se acerca al medio siglo pero que, como otras tantas ya citadas, recoge el legado del pasado, como el de la hermandad de La Pasión. De nuevo, las profundísimas raíces cofrades rambleñas permiten admirar obras de arte cofrade con siglos. Casi cuatro siglos. 399 años para ser precisos, entre la talla del Ecce Homo, atribuido a Juan de Mesa el Mozo, quizá de 1601 (la talla del paso es del artista rambleño Sebastián Salado Ruiz) y el grupo de María Santísima de las Angustias y el Santísimo Cristo de la Misericordia, del cordobés Enrique Ruiz Flores (año 2000), una maravilla de la imaginería contemporánea y que ahora sucede a otras tallas que fueron titulares de la hermandad y a las que no les faltaba mérito, como una virgen del siglo XIX de la misma advocación. Otra singularidad: el paso de Las Angustias es el único de la Semana Santa de La Rambla portado por costaleras, 24 en total. Este año acompaña a los pasos la banda de cornetas y tambores Humildad y Soledad, propia de la hermandad. 

Llegado el Viernes Santo, la Semana Santa rambleña vive con intensidad la madrugada. Así, este año saldrá a las 3.00 horas desde la iglesia del Espíritu Santo el Jesús Nazareno que tallara Juan de Mesa poco después del Jesús del Gran Poder de Sevilla. El Señor de la Rambla, alcalde honorífico de la localidad (el nombramiento se hizo coincidir con la celebración en el 2022 del Año Jubilar con motivo 400 aniversario de la llegada de la talla a la localidad), copa las promesas de creyentes desde hace siglos, desde que la hermandad se fundara en 1603. Impresionante el paso, del sevillano Manuel Guzmán Bejarano, con candelabros de guardabrisas de Camacho Vega y que fue dorado y policromado por Cristóbal Cubero en Priego.

Detrás, el paso de Nuestra Señora de la Amargura con San Juan Evangelista y Santa María Magdalena, que talló Francisco Romero Zafra en 1991, 2006 y 1992, respectivamente, cuenta también con hitos, como la mesa metálica de Hermanos Aguado, bordados de Antonio Villar (que viste a la Virgen) con diseño de Fray Ricardo y orfebrería de los Hermanos Santos. 

Hasta el mediodía del Viernes Santo acompañará este año al cortejo la agrupación musical de Nuestro Padre Jesús Nazareno tras el paso del Señor y la Unión Musical Rambleña con el paso de palio. También este 2004 se estrena una túnica para el Señor con bordados en oro fino del siglo XIX, así como diversas piezas para el ajuar de la Virgen de la Amargura.

Ya por la tarde saldrá La Expiración desde el convento de la Santísima Trinidad. La corporación también tiene tallas anteriores a su propia fundación oficial, de 1719, con la imagen del Cristo de la Expiración, obra anónima del siglo XVII de la escuela sevillana y atribuida al círculo de Juan de Mesa, y la Virgen de los Dolores en un segundo paso, del mismo siglo y también de autor anónimo, rescatada en su día de la antigua ermita de la calle de La Trinidad. En este 2024 se estrena el fleco del manto de salida de María Santísima de los Dolores y la procesión irá acompañada por la agrupación musical Santísimo Cristo de la Expiración tras el paso de Cristo, y la Unión Musical Rambleña tras el palio.

Sábado Santo

Por su parte, el Sábado de Gloria da el protagonismo a la hermandad del Santísimo Cristo Yacente y Nuestra Señora de la Soledad, fundada en 1738 y con una amplísima historia de anexiones y refundaciones (la más reciente, en 1974) y con una imagen que nos llega desde sus orígenes, el Cristo Yacente, de finales del siglo XVI, mientras que la Virgen de la Soledad es obra del valenciano Venancio Marcos Roch, que también talló la Esperanza de La Rambla hace un siglo. La hermandad estrena este año un juego de sotanas y roquetes para el cuerpo de acólitos y ha remozado de la estructura interna de los candeleros del paso de la Virgen. El Santísimo Cristo Yacente, tras esta Semana Santa, será trasladado para su restauración por José Daniel Henares Paredes. Una capilla musical de flauta, oboe y fagot acompañará al primer paso, mientras que, junto al segundo, irá la banda de música de la asociación músico-cultural Juan Mohedo, de Montoro.

Ya el Domingo de Resurrección es la propia Agrupación de Hermandades de La Rambla, fundada en 1980, la que procesiona desde la ermita de San José el Resucitado, obra de Miguel Arjona Navarro (1997), en un cortejo con una representación de tres hermanos por cada una de las cofradías rambleñas y sin hábitos. El gesto personifica la unión y la fuerza de estas corporaciones, artífices de una Semana Santa singular en Córdoba y repleta de hitos artísticos e históricos como pocas en Andalucía. Este año acompañará musicalmente al cortejo la agrupación de Nuestro Padre Jesús Nazareno.

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