Córdoba es una provincia con un gran patrimonio histórico, cultural y arqueológico que no solo se encuentra expuesto en los museos de la capital, sino que, también, está abierto al visitante en recintos museísticos más desconocidos pero no menos relevantes en diversas localidades.
Además, la oferta de arte en forma de galerías también se abre a propuestas que conectan desde el entorno rural con la pintura, la escultura y otras formas de expresión. En definitiva, Córdoba muestra todo su potencial en museos y galerías de arte que queremos mostrarte.
Museo Histórico-Arqueológico Municipal de Baena
Abierto en el año 2010 en la Casa de la Tercia, histórico edificio de finales del siglo XVIII, el Museo Histórico-Arqueológico Municipal de Baena atesora un importante patrimonio distribuido en varias plantas. Además de restos prehistóricos, las piezas más importantes de este centro giran en torno a la época íbera y romana, con esculturas procedentes de los yacimientos de Torreparedones, Cerro del Minguillar, Cerro de los Molinillos y Torre Morana. Destaca la thoracata del emperador Claudio, otra gran escultura de Augusto y varias de personajes de la familia imperial.
Historia de Cabra
En Cabra podemos disfrutar de dos museos relevantes. El Aguilar y Eslava, ubicado en el centro educativo del mismo nombre, recoge muestras de pintura y de escultura, además del fondo documental de una de las instituciones de enseñanza más antiguas de la provincia. Por su parte, el Museo Arqueológico de Cabra, el museo local más antiguo de la provincia, atesora varias tallas muy relevantes para la historia del arte: el Eros dormido, Dionisos y una réplica de un ejemplar único del Mitra Tauroctonos, procedente del Arqueológico Provincial.
Museo Histórico-Arqueológico de Almedinilla
Sin salir de la Subbética cordobesa, tan rica en arte y cultura, con raíces milenarias, llegamos a Almedinilla, que cuenta con varias excavaciones arqueológicas relevantes. En una de ellas, la necrópolis de El Ruedo, se encontró la estatua del dios Hypnos, una escultura de Hermafrodita y varias falcatas, estas, de un poblado íbero cercano. Todo ello puede disfrutarse en el Museo Histórico-Arqueológico de Almedinilla.
Lucena, cuna del arte medieval
En Lucena podemos disfrutar de varios museos y exposiciones artísticas que deleitarán a todo tipo de visitantes. Desde la Casa Museo de la Virgen de Araceli, sede social de la popularísima cofradía del mismo nombre, a la exposición permanente de la artesanía velonera lucentina, en la Casa de los Mora. En el Centro temático del Bandolerismo Romántico se expone la historia del fenómeno de los bandoleros en cuatro plantas de exposición. Además. El Palacio de los Condes de Santa Ana, del siglo XVII, alberga el centro de interpretación de Lucena. Finalmente, Lucena cuenta con el Museo Arqueológico y Etnológico ubicado en el Castillo del Moral. Una fortaleza medieval que ahora puede visitarse para disfrutar del esplendor de la Lucena judía de aquel periodo vital de la historia de nuestra provincia.
Alimento para el alma en Los Pedroches
Viajamos ahora al norte, al Valle de Los Pedroches, donde se sitúa el Museo Marcos Redondo, en Pozoblanco. En esta localidad vivió el insigne músico nacido en Ciudad Real y conocido por su gran voz de barítono. Cerca, en Alcaracejos, uno puede saciar el apetito acudiendo al Museo de la Matanza, donde además de comida para el cuerpo encontrará alimento para el alma.
Membrillo en Puente Genil
Curiosa es la sala que se encuentra en el Museo Histórico Provincial de Puente Genil. Además de cerámicas, vasijas, estatuas y columnas que recorren la edad antigua y medieval, en su sala III encontramos un análisis del dulce del membrillo. La industria agroalimentaria prieguense se abre paseo a nivel museístico aquí, donde podremos conocer el proceso de fabricación de este material y el fondo histórico y cultural de las personas que han trabajado este arte culinario a lo largo de la historia.
El paso de los siglos en Montoro
En Montoro encontramos un Museo Arqueológico muy interesante, puesto que dispone de una importante colección arqueológica y paleontológica. Además, destaca su estela del guerrero, un testimonio en piedra de la élite militar de aquel momento nada más y nada menos que 13 siglos antes de nacer Jesucristo. El Ángel Orante, obra del famosísimo escultor Mateo Inurria cuando apenas contaba con 14 años de edad, es otro de sus grandes atractivos. Y no menos interesante es la thoracata de un emperador romano que data del siglo I después de Cristo.
Un jefe de Estado en Priego
No por recoger sucesos e historias del siglo XX es menos importante un museo. Es lo que ocurre con la Casa Museo de Niceto Alcalá-Zamora, ubicada en Priego de Córdoba, localidad donde nació este presidente de la II República Española. El jefe de Estado que Priego donó a España vivió en este inmueble de la calle Río 33, que recoge, al detalle, la personalidad de este insigne hombre de la provincia.
Trío especial palmeño
En Palma del Río disponemos de tres museos muy especiales. El primero, el municipal, por su ubicación, en el edificio de las históricas Caballerizas, reformadas hace apenas unos años. Los otros dos, por los materiales que contienen: el Museo de Vitorio y Lucchino acoge los bienes cedidos por la fundación de los modistos al Ayuntamiento palmeño; mientras que el Museo de Manuel Benítez El Cordobés recoge la lucha vital y superación del torero.
El arte empapa a la provincia
Finalmente, entre las galerías de arte de la provincia, como elemento diferencial de la pura creación humanística, destacan dos centros clave. La primera es O Gallery Espacio de Creación Contemporánea, en Las Navas del Selpillar (Lucena). La segunda es la galería La hormiga, en Priego de Córdoba.
