Degradación

Andan muy contentos en mi tierra por la concesión de las Banderas de Andalucía, en concreto por esas que se hacen llamar de las Ciencias Sociales y las Letras, y que otorga la Junta de Andalucía. Con ellas se trata de reconocer los méritos, acciones y servicios excepcionales o extraordinarios realizados en beneficio de cada provincia por personas físicas o jurídicas, grupos o entidades. La de Sevilla ha recaído en Blue Jeans, o lo que es lo mismo, en Francisco de Paula Fernández González.

Le faltó poco a la Feria del Libro de Sevilla para difundir entre sus redes tan magno acontecimiento. Con una felicidad desbordante manifestaban su alegría, su admiración, y acompañaban la noticia con esas interminables instantáneas de firmas de libros multitudinarias. Cuando en una feria del libro observes una cola inmensa piensa que al final, en el stand, se encuentra un Blue Jeans de la vida, o lo que es lo mismo, un ‘woke’.

El término «woke» tiene su procedencia como vernáculo afroamericano, y significa despierto, consciente, no dormido. Pero fue a partir de los años treinta del pasado siglo cuando comenzó a utilizarse para describir los movimientos de justicia social de izquierda. Esa sensibilidad, que está muy bien y es muy correcta, ha conseguido que sus seguidores se vuelvan carajotes, dependientes, y hasta, en la mayoría de ocasiones, han dejado de tener su propia identidad.

Son esos «despiertos» los que están más dormidos, sin importarles lo que ocurre a su alrededor se manifiestan preocupados por lo que ocurre alrededor falsamente. Es como una gran evasión, un signo de la degradación que nos rodea en esta nueva Edad Media.

Los ‘wokes’ son esos bufones y juglares que aparecían en ‘El séptimo sello’, esa gran película sueca de 1957, escrita y dirigida por Ingmar Bergman.

Pero por encima de todo, desde aquí queremos dar la enhorabuena a Blue Jeans, o lo que es lo mismo, a Francisco de Paula Fernández González.

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