El Córdoba CF busca acabar con buen pie ante el Linares

El Córdoba CF se prepara para la última sesión de mediciones de la presente pretemporada, la del colofón a su sexta semana y la que marcará el estado real en el que llegan los de Iván Ania -tanto físico, deportivo como mental- al esperado estreno en Liga en El Arcángel frente a la UD Ibiza (27 de agosto), para el que queda poco más de una semana. Todo pasa por la idea de acabar con el pie derecho y buen regusto en la cita frente al Linares Deportivo, este sábado en el Municipal de Linarejos (21.00 horas), como broche a la preparatoria en una de las sedes clásicas del itinerario veraniego blanquiverde de las últimas campañas, a la vez que primer aperitivo de los encuentros habituales ante los azulillos que se repetirán con fuego real de por medio en el Grupo 2 de Primera Federación en tan solo unas semanas, aunque ya con más que las sensaciones en juego.

Una medición idónea

Tras un calendario de tests estivales de lo más colorido, con compromisos ante adversarios de Primera División -Sevilla y Cádiz-, la propia Primera RFEF -Mérida y Antequera- e incluso de la Tercera Federación -Sevilla Atlético, Córdoba CF B y Jaén-, lo de ahora frente al Linares Deportivo será una última vara de medición idónea para calibrar en qué punto de competitividad y rodaje se encuentran algunos de los rivales de este curso, con una muestra de al menos tres equipos -con presumibles distintas aspiraciones- como referencia parcialmente fiable antes de la puesta de largo. El balance hasta ahora es claro, si bien ofrece dudas: un triunfo sobre la bocina y una derrota con tintes amargos. 

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Y es que el Córdoba CF necesita de su mejor versión para cumplir con la triple tarea que guarda en su llegada a tierras linarenses, en la que la intención de despedirse con los ánimos al alza, marcar terreno frente a un homólogo de la misma categoría y ajustar los últimos apuntes y retoques del libreto se mantienen como objetivos, bajo la sombra de la persistente falta de gol y generación de oportunidades que se ha vuelto todo un debate durante este mes y medio de puesta a punto. El escenario mejoró ante el Jaén, eso sí, donde Simo y Paco Fernández pudieron ver puerta, aunque la demanda imperante de que los hombres de ataque blanquiverde se enchufen en la antesala de la Liga parece una obligación más que un deseo, máxime con la llegada de Alberto Toril -especialista en el fútbol aéreo para potenciar la finalización al juego por banda, explotado sin mucho acierto a lo largo de pretemporada- a la ecuación para sumar competencia a la hasta ahora solitaria punta conformada por Antonio Casas y el futbolista del filial Óscar Jiménez.

En el mediocampo también estará el foco. La parcela de medios ha sido la primera en cerrarse por parte de la dirección deportiva encabezada por Juanito durante esta ventana de traspasos, en la que se han formalizado las llegadas de Isma Ruiz, Recio y Álex Sala, junto a la continuidad de Diarra y la promoción de Cristian Delgado desde el Córdoba CF B. Ciertamente, una de las áreas señaladas durante la aciaga cita en tierras antequeranas y el posterior primer acto de contrastes en el Nuevo Estadio de la Victoria frente al Real Jaén -pese al triunfo final- fue el mediocampo, donde la todavía falta de sintonía entre algunas de las piezas quedó evidenciada por momentos. Ahí Ania tiene trabajo, aunque le sobra materia prima. 

Con un ojo en la enfermería

Pensando en la lógica carga física de las últimas fechas y con las ausencias de Adilson Mendes y Cristian Delgado confirmadas, por otra parte, a Iván Ania también le tocará recomponer el rompecabezas para ofrecer el dibujo más fiable posible, con prácticamente el bloque al completo a excepción del algecireño y el lisboeta -éste último se prevé disponible para el arranque de Liga-, junto a las recientes molestias de Simo Bouzaidi en los isquiotibiales, que lo mantuvieron al margen en la sesión de este viernes y lo presentan como duda para el duelo en Linarejos. Todo indica, de este modo, que la apuesta será ahora mucho más próxima al once que saldrá a competir en el estreno frente aI Ibiza en El Arcángel, pese a los ajustes, buscando hacer todo lo similar posible la última prueba con balas de fogueo a lo que un duelo de cruda competición real sería, por lo que la cara del nuevo Córdoba CF este sábado apunta a ser la más fiel a su verdadero nivel.

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Sí se encontrará operativo y en plena disponibilidad para esa tarea el lateral José Calderón, uno de los protagonistas durante la semana de entrenamientos debido a ciertas molestias en la zona de su tobillo, ocasionadas durante la accidentada sesión del pasado martes, en la que el paradeño no pudo terminar de ejercitarse junto al resto de sus compañeros. El avance de las jornadas, no obstante, ha mitigado las molestias del paradeño e incluso pudo formar parte del elenco titular durante la cita en el Trofeo del Olivo, por lo que su participación frente a los azulillos parte prácticamente asegurada, a expensas del esquema final diseñado para la cita desde el banquillo califal.

En la misma línea, otra de las reciente figuras entre algodones de la enfermería como Marc Esteban, futbolista del filial en dinámica del primer equipo, igualmente ha conseguido avanzar en la recuperación de una microrrotura muscular sufrida durante el pasado envite amistoso frente al Mérida en el Estadio El Romano -requirió de cuidados especiales al inicio de semana-, aunque sin garantizar su disposición para el encuentro, al igual que la del lateral Álex López, también arrastrando una dolencia ubicada en la zona del abductor y con pocas papeletas para volver a la dinámica del grupo hasta entrado el curso liguero.

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Enfrente partirá un Linares Deportivo decidido a elevar su rendimiento de esta preparatoria, en la que ha disputado con otros seis compromisos de diferente pelaje, todos frente a combinados enmarcados entre Primera RFEF y la Tercera Federación y con un balance de dos empates, una derrota y tres triunfos. Los de Óscar Fernández, además, serán el cuarto rival del Córdoba CF de Iván Ania en el nuevo curso, también el segundo en pasar por El Arcángel, con la cita del próximo 17 de septiembre fijada en la agenda y ciertos visos que lo de esta trigésimo quinta edición del Trofeo Ciudad de Linares tendrá mucho de lo que podrá verse en el campeonato, con escaso un mes de distancia respecto a su siguiente pugna en el circuito doméstico.

El plantel linarense, del mismo modo, también se ha visto ampliamente reformado respecto al desplegado durante el pasado ejercicio 2022-2023 en la categoría de bronce, con un total de ocho incorporaciones -las mismas que los cordobesistas- para abanderar la nueva tentativa de ascenso, para la que ya aportan los fichajes de Pepe Mena, Teddy Shuterland, Javier Rentero, Tano Bonnín, Manolo Molina, Berlanga, Fran Ortuño y Zaki, como respuesta al amplio capítulo de despedidas en el que también se añadió el técnico Alberto González -ahora en el Betis Deportivo-, junto a las múltiples marchas por parte de Álex Sancris, Lolo González, Alfonso Candelas, Fran Callejón, Abeledo, Arnedo, Edu Viaña, Squadrone, Cañete, Alfonso Fernández, Fermín López, Aitor Gelardo y los ex blanquiverdes Antonio Caro y Edu Campabadal.

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