Acoso laboral

Un protocolo ofrece recursos para actuar en situaciones hostiles

Se trata de prevenir y resolver conflictos en esta materia entre la comunidad universitaria

El jefe del Servicio de Prevención y Protección, Fernando Palomares.

El jefe del Servicio de Prevención y Protección, Fernando Palomares. / Manuel Murillo

Uno de los riesgos psicosociales con más sesgo de género es el acoso laboral, contra el que la Universidad de Córdoba ha establecido un protocolo de prevención «cuya finalidad es la resolución de conflictos en esta materia, es un procedimiento preventivo que busca ofrecer recursos para intentar desactivar situaciones o actitudes que se perciben hostiles. En este momento, la Comisión que gestiona este protocolo se convierte en un agente esencial», explica el jefe del Servicio de Prevención y Protección, Fernando Palomares, quien indica que «cualquier medio es válido para comunicar con la comisión, incluso una simple llamada. Además, la activación puede partir de los miembros de la comisión y de cualquier otra persona que tenga conocimiento de estas situaciones, con total garantía de privacidad».

Además de medidas cautelares, si la comisión evidencia elementos constitutivos de alguna situación de acoso, debe comunicarlo cuanto antes. «Esta comunicación puede ser desde la propuesta al Rector del inicio de un expediente sancionador hasta poner en manos de la fiscalía la información disponible ya que, en ocasiones, podemos estar ante un ilícito penal con resultado de penas de privación de libertad», apunta Palomares.

El protocolo aborda distintas situaciones de acoso. Para ello, el estudiantado está representado en la comisión por una persona designada por el Consejo de Estudiantes y, respecto a personas ajenas a la UCO, en su ámbito de aplicación, está incluido el personal de las empresas contratistas, en sus relaciones con la Universidad.