El grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Córdoba ha exigido al alcalde, José María Bellido, que “intervenga e incluya” la rehabilitación del antiguo convento de Regina al entender que “Córdoba no puede perder la oportunidad y el dinero de otras administraciones para poner en valor un edificio importantísimo para el desarrollo social, cultural y turístico de la ciudad”.

Según la nota de IU, este equipo de gobierno vuelve a demostrar que aplica la “ley del mínimo esfuerzo” y que “no apuestan verdaderamente por el casco histórico y por el patrimonio”, tal y como podemos observar en los casos del Arco del Portillo, Templo Romano, que "durante un año no ha habido ningún movimiento, San Agustín 5 o ahora con Regina, donde señalan que hay otras prioridades en materia de inversiones, y todo el mundo sabe que la falta de ejecución de proyectos en este 2020 conllevará un superávit sin precedentes”.

“Precisamente, dinero no les hará falta por la falta de ejecución y lo que hace falta es voluntad y ganas de querer mejorar la situación del patrimonio de esta ciudad, algo que parece no tiene este gobierno local, con su Alcalde al frente”, sostiene IU en la nota.

"Entendemos que el alcalde no puede pasar más tiempo de perfil, debe recapacitar, rectificar a su delegada de Turismo e incluir” este proyecto en el Plan Turístico de Grandes Ciudades ya que de lo contrario estaría “poniendo en peligro” las subvenciones de otras administraciones, como la concedida por el Ministerio de Fomento, referente al 1,5% Cultural, que serviría para rehabilitar los patios y el antiguo convento, prosigue IU.

En este caso el ministerio aporta 465.000 euros (66%) y el Ayuntamiento 240.000 euros. Plan Turístico García ha querido recordar que "en el mandato anterior impulsamos, además de un proceso participado con los vecinos y vecinas de la zona, diversas actuaciones en este edificio, una de 120.000 euros para trabajos de desescombro, limpieza y otras tareas y, la segunda, de 700.000 euros para la restauración de la nave de la antigua iglesia, que se contrató pero que la empresa adjudicataria abandonó. Para esta segunda actuación la Junta aportaba 420.000 euros y el Ayuntamiento 280.000 euros".