El Atlético Espeleño confirma su reacción y somete al Coria

En estado de gracia. La dinámica del Atlético Espeleño parece no tocar techo en este tramo de la temporada, en el que los pupilos de Quero han encontrado la fórmula del triunfo para convertir la odisea de llevarse los tres puntos al inicio del curso, en un mero trámite casi independiente del rival o escenario. Ante el Coria, rival directo por la permanencia, sin bajar el ritmo un ápice, lo de los rojillos no quedó para menos, con el cuatro triunfo para su casillero tras una acción al borde de lo impecable, definida con tempranero gol de Antolín que fue suficiente para apuntarse un triunfo que marca un antes y un después en la presente campaña. 

La cita inició de la mejor forma. Tan solo cinco minutos fueron necesarios para que el Municipal de Espiel celebrara el primero -y único- de los goles de la tarde, tras una acción a balón parado desde la esquina a la que, con acierto, en segunda jugada, remachó Antolín para situar el 1-0 cuando parte del respetable todavía andaba ubicando su asiento. Fue el preludio a una lección de dominio, saber estar y buen juego espeleño, relegando al Coria a buscar el fútbol directo para intentar hacer mella en el entramado rojillo. No fue así ni antes del descanso, ni después, cuando la contienda volvió a abrirse esporádicamente con intercambios de zarpazos desde un lado y el otro, aunque con el Espeleño siempre marcando los tiempos. Juan Andrés mandó un balón al palo, Tommy rozó la sentencia y justo antes Ángel acarició el empate, aunque todo quedó servido en el 1-0 inicial. Que sabe a gloria. 

Con estos tres puntos, los de Quero ganan la partida con extrema solvencia ante uno de los rivales directos en la pugna por permanecer en Tercera RFEF al final de temporada, ampliando su renta con respecto al descenso para meter un tranquilizador colchón de cinco puntos de por medio, con ahora 21 en el casillero. Cuestión de dinámicas.

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