Jóvenes universitarios sobre las diferencias de género en sus carreras: "No regalan nada"

Hablamos con tres jóvenes vinculados a la Universidad de Córdoba, que nos cuentan sus objetivos, metas, circunstancia en la carrera y, sobre todo, si han percibido diferencias de género en sus grados.

Lucía Rodríguez | Alumna de cuarto curso de Medicina

Un grado con más alumnas que alumnos

Lucía Rodríguez está estudiando cuarto de Medicina en la Universidad de Córdoba. También es la presidenta del Consejo de Estudiantes de la Facultad de Medicina y Enfermería. Es la primera de su familia que se dedica a una titulación sanitaria y señala que se decantó por estudiar Medicina cuando estaba haciendo tercero de la ESO, en la etapa en la que tuvo que aprenderse los contenidos relacionados con este ámbito de las asignaturas de biología y química. En la facultad de Córdoba hay más estudiantes mujeres en Enfermería y Medicina, mientras que en Fisioterapia está más igualado el alumnado de ambos sexos. Preguntada por el hecho de que en Medicina el rendimiento académico es superior en las mujeres que en los hombres, según los datos de la UCO, ella asegura que no percibe diferencia alguna, «pues hay asignaturas que te pueden costar más trabajo que otras, independientemente de si eres mujer u hombre, dependiendo del interés particular de cada estudiante, al margen de que hay materias más complejas porque tienen más créditos y hay que dedicarles más tiempo». 

Lucía no percibe distinción alguna a la hora de ser puntuada o tratada ni en la facultad, ni en las prácticas que realiza en centros sanitarios por ser mujer, destacando que hay mayoría de féminas trabajando en la sanidad, en las distintas categorías existentes. 

Jaime Millán | Graduado en Química

Una carrera elegida por mayoría femenina

Jaime Millán estudió el grado de Química en la Universidad de Córdoba y actualmente se encuentra realizando los estudios de doctorado, en el grupo de Química Analítica, que dirigen los profesores Soledad Cárdenas y Rafael Lucena. La carrera que realizó este joven es elegida por una mayoría de chicas frente a chicos, de forma que alrededor del 70% de matriculados son mujeres, calcula Jaime.

Las mujeres logran mejores notas en el 77% de los grados de la UCO

Para poder cursar estos estudios no hace falta nota, simplemente con aprobar la Selectividad, indica. A Jaime le gustaría quedarse vinculado a la Universidad cuando termine el doctorado, aunque asegura que no es un «camino fácil». Para ello, necesita seguir completando estudios, con estancia posdoctorales fuera de Córdoba, después de haber hecho dos predoctorales. A pesar de que durante la realización del grado había mayoría femenina en clase, nunca percibió que hubiera trato o puntuación distinta por el hecho de haber menos hombres y más mujeres. 

Según los datos de la UCO referentes al curso 2022-23, los alumnos de Química de la UCO lograron un rendimiento académico del 70,5%, frente al 65,5% de las alumnas. Sin embargo, Jaime no percibió nunca diferencias. «Había que currar, porque no regalaban nada. Para sacar el grado se requería de una constancia», resalta.  

Irene Casares | Graduada en Ingeniería Informática

Estudios ya no solo vinculados a hombres

Irene Casares se decantó por estudiar Ingeniería Informática en la Universidad de Córdoba cuando comprobó que era una materia que tiene mucha utilidad y fin práctico, sobre todo en las últimas décadas, en concreto lo que está más relacionado con la ciberseguridad. Graduada en esta carrera desde hace un año, en estos momentos forma parte de un grupo de investigación, aunque no le importaría encontrar trabajo en alguna empresa que quisiera contar con su perfil. 

Durante sus estudios en la Escuela Politécnica Superior recuerda que en clase eran apenas seis chicas, frente a algo más de cien chicos, pues tradicionalmente esta titulación ha sido más elegida por hombres, aunque más mujeres se están animando a escogerla en los últimos tiempos. Irene apunta que, aunque la informática se ha visto más que podía interesar a los hombres por su complejidad, esa percepción ha cambiado porque las mujeres no tienen por qué ser menos capaces en este terreno que los varones. Recuerda que en el segundo curso del grado fue cuando notó más la dificultad de los estudios, por lo que necesitó recibir el respaldo de una academia, pero al igual que otros compañeros hombres.

La titulación de Ingeniería Informática de la UCO obtuvo en el pasado curso un rendimiento académico del 75,03% entre las mujeres matriculadas y de un 71,44% entre los alumnos.  

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