Un balance con muchos matices. El Córdoba CF volvió a ahogarse entre la fragilidad defensiva, la poca solvencia en ataque y la falta de puntería para ceder la sexta plaza en la batalla ante el Linares Deportivo (2-1), demostrando una semana más que la «mala racha» ha dejado de ser meramente una dinámica para enquistarse como una nueva realidad, una mucho más compleja de digerir. A tenor de la situación, el preparador blanquiverde, Germán Crespo, manifestó sentirse «con fuerzas» para seguir al frente del banquillo, aunque cada vez con menos empaque tras la dinámica negativa prolongada que azota al equipo durante esta segunda vuelta del campeonato en Primera RFEF. «Mientras esté y tenga la posibilidad, me siento con fuerzas. Hace dos meses me sentiría más fuerte. Cuando no te van saliendo las cosas, los resultados, tu propia cabeza te dice que se puede mejorar», confesó una vez finalizado el choque.

Su continuidad

En la línea de su posible salida de la dirección del primer equipo califa, el granadino también reconoció la difícil situación a la que se enfrenta, delegando la decisión a la cúpula directiva y catalogando a los «resultados» y las «sensaciones» como jueces en cuanto a su continuidad. «Hemos tenido algunas veces malos resultados, pero las sensaciones han sido buenas, al final la decisión la tiene la directiva. Sabemos que cuando no acompañan los resultados puede pasar, habrá que ver la decisión que toma el club en estos días», admitió. «Estamos intentando mejorar todo, analizamos los partidos, trabajamos para mejorar domingo a domingo, pero cuando no salen las cosas evidentemente te sientes peor», añadió seguidamente.

Germán Crespo da indicaciones a sus jugadores durante el choque. Francisco fernández

«Es una dinámica de resultados que se está viendo también en el juego. No van saliendo las cosas, eso pesa en el jugador, en el equipo. Esa claridad que hay que tener de ideas en momentos complicados, pues cuando no llegan los resultados cuesta mucho más», apuntó.

El mal juego, un síntoma más

En lo relativo al encuentro ante el cuadro azulillo, en la línea de mal juego y escasa claridad de ideas de las últimas fechas, el preparador reconoció que el equipo sigue sin dar con la tecla, especialmente en la faceta defensiva. «Ha sido un partido en el que no hemos entrado bien. El Linares nos ha generado ocasiones en esos diez primeros minutos. Es verdad que cuando han pasado hemos intentado por lo menos tener algo más la posesión, pero al final hemos hecho muchos regalos defensivos. Balones en salida en los que hemos tenido pérdidas... Eso ha hecho que el Linares se sienta cómodo, sobre todo en tres cuartos de campo. Hemos terminado la primera parte con alguna ocasión para haber hecho algún gol», señaló.

Tras la irregular puesta en escena, el planteamiento de la segunda mitad también se esfumó de un plumazo, materializado en goles rivales: «Ya en los primeros minutos hemos comentado en el vestuario que había que mantener máxima concentración. Creo que ahí hemos estado muy flojos, muy blanditos y así han llegado los dos goles”, indicó. «No nos tenemos que engañar. Lo mismo que la semana pasada tuvimos tres o cuatro ocasiones claras y no las metimos, pues hoy nos ha faltado eso en los últimos metros. Hemos cambiado en la primera parte el sistema. Nos estaba faltando llegada, por eso en el descanso hemos hecho un cambio más ofensivo, aunque no nos ha dado tiempo, nos ha costado adaptarnos al resultado», manifestó.

Carlos Caballero se lleva las manos a la cabeza tras un lance del encuentro. Francisco fernández

El cambio de sistema, otro revés

La novedosa fórmula de la introducción de un tercer centrocampista, renunciando a un jugador en el perfil de enganche o mediapunta, también fue valorada por el director de orquesta blanquiverde, destacando su intención de procurar «más control» al equipo, aunque con un resultado totalmente contradictorio al ideado, obligado a rearmar el esquema con la entrada de un segundo delantero con el arranque del segundo acto. «Buscaba más llegada al área contraria. Salvo esos dos acercamientos que hemos tenido pero no se han finalizado, nos estaba costando. Estaba costando ese jugador, ese segundo punta, que tiene más llegada al área. Hemos buscado tener más balón en mediocampo, pero si al final no tienes el balón y tampoco tienes esa profundidad, pues lo hemos intentado con el cambio de Antonio Casas», apostilló.