Pese a que cada vez más se busca romper con la estacionalidad del turismo, Córdoba sigue siendo sinónimo de mayo, como mayo es sinónimo de Córdoba, de sus cruces, patios y Feria en el mes en el que eclosionan las flores y toda la capital es una fiesta. Sin embargo, poco a poco las modas cambian y los turistas buscan huir de las aglomeraciones propias del mes cordobés por excelencia, buscando fechas en las que poder disfrutar de la ciudad sin bullicio ni esperas.

Muestra de ello son las estadísticas de 2023, que revelaron que el mes de octubre le ganaba terreno a mayo en reservas hoteleras y visitas de turistas extranjeros, trasladando las multitudes del mayo primaveral a las primeras semanas del otoño cordobés, que en parte, se asemeja meteorológicamente a una primavera suave y soleada, con las mismas expectativas por parte de los visitantes pero con menos colas y esperas.

No obstante, cuando todo apuntaba a que octubre era el otro mes must para visitar Córdoba, la revista especializada National Geographic se desmarca de las tendencias y apunta al mejor mes para visitar Córdoba: febrero. ¿Y por qué? Porque la capital de los cuatro Patrimonios de la Humanidad es, para los expertos, el destino perfecto para una escapada romántica de fin de semana en el mes de los enamorados por antonomasia.

Turistas con maletas por la Mezquita Catedral. A.J. González

Una de las ventajas es la menor afluencia de visitantes, lo que permite visitar los monumentos con más tranquilidad, y recorrer unas laberínticas calles de la Judería que presenta menor bullicio del habitual en comparación con los meses grandes del turismo en Córdoba. Pero, ojo, ello no quiere decir que haya menos gente, sino que no hay tantísima gente como es habitual en los momentos pico del turismo en Córdoba, que ahora se extiende de marzo a junio, y de octubre a diciembre. Y es que en febrero, Córdoba todavía está en lo que en el circuito turístico se califica como temporada baja, lo que se traduce en precios más económicos y más facilidad a la hora de planificar las visitas. Si bien, aun en temporada baja se sigue recomendando sacar las entradas con antelación.

El recorrido imprescindible para un finde en Córdoba

En su artículo sobre Córdoba, National Geographic incluye sus recomendaciones para la organización de una visita de fin de semana a Córdoba. Pero antes de nada, tres recomendaciones: madrugar, calzado cómodo y mucha hambre para disfrutar de los manjares que ofrece la capital.

La ruta empieza por los Patios de Córdoba, y el número 44 de la calle San Basilio, sede de la Asociación de los Amigos de los Patios Cordobeses, y que se puede visitar durante todo el año. La visita continúa por el Alcázar de los Reyes Cristianos, para seguir hasta la Mezquita-Catedral. Y de ahí, a perderse sin rumbo por la Judería, con parada obligada en la calleja de las Flores.

Calleja de las Flores de Córdoba. MANUEL MURILLO

Y no hay que olvidar el paseo por la ribera del Guadalquivir, con el Puente Romano y la Calahorra, inmortalizados con los correspondientes selfis.

¿Te queda tiempo? National Geographic te recomienda aprovechar la parada en Córdoba para  acudir a Medina Azahara o dar un salto a Almodóvar del Río para visitar el castillo de Almodóvar, una de las fortalezas más impresionantes de Andalucía, inmortalizada, entre otros, por la serie de Juego de Tronos.

Recomendaciones 'gastro' para un finde en Córdoba

Tanto recorrido abrirá sin duda el apetito del visitante, que podrá disfrutar de otro de los patrimonios oficiosos de la capital: su gastronomía. “¿En qué otra ciudad existe una calle dedicada al salmorejo, con la mismísima receta e ingredientes inscritos en losa sobre la pared?, indica el reportaje de National Geographic.

Imagen del flamenquín cordobés. CÓRDOBA

La revista destaca las tabernas de una ciudad, en la que “por muy temprano que sea, uno siempre termina dando con un bar con pan recién hecho y una botella de aceite de oliva dispuesta sobre la mesa”. Sobre los platos a elegir, apuntan que “es difícil equivocarse en la capital del rabo de toro, el flamenquín y las berenjenas con miel".

Y si de restaurantes se trata, destacan cuatro referentes: Garum 2.1, “conocido por su salmorejo y las vistas desde la azotea”; La Casa Manolete Bistró, descrito como “una experiencia sofisticada”; las vistas de la Mezquita-Catedral del restaurante del Hotel Balcón de Córdoba; y la Casa Pedro Ximénez, que combina cocina tradicional con las vistas de su rooftop.