El aparcamiento de la Feria gusta a todos. Al menos, esa es la impresión que ayer comentaban los usuarios que a mediodía dejaban allí sus vehículos para acceder a El Arenal. El primer indicador de la buena acogida que por el momento ha tenido este recinto tuvo lugar el pasado viernes, cuando, según explicó Manuel García, un responsable del Grupo Barea, ya albergó más de ochocientos vehículos, de los 3.200 para los que tiene capacidad. Y esto sin contar que, como observó otro trabajador, muchas personas aún no lo conocen.

Uno de los objetivos de este espacio es atraer a los visitantes de otros municipios y provincias, pero este párking también ha beneficiado a vecinos de barriadas periféricas, trabajadores e incluso a los jóvenes que no han encontrado un hostal y piensan en regresar a su ciudad al día siguiente. De este modo, los granadinos Raúl Coca e Iván Crespo señalaron que "es una idea extraordinaria, porque si lo dejas en cualquier otro sitio estás preocupado, pero aquí está controlado día y noche. Nosotros nos iremos mañana cuando nos cansemos". En la misma línea, Lola Nieto, que acudía a la Feria con la familia, explicó que "vivimos en la zona del aeropuerto y antes teníamos que aparcar en el centro y coger un taxi, por lo que nos parece estupendo".

Félix Soto, trabajador de la caseta Abril, afirmó que el nuevo párking también ha beneficiado a este colectivo y Javier Cabrera, otro profesional, manifestó que los camiones de los feriantes, que se encuentran aparcados en un espacio anexo, "están más cuidados". La lucentina Nieves Tubío, que visitó El Arenal con la familia, apuntó que "el precio es un poco caro, pero nos ha venido fenomenal, porque está muy cerca".