"Queremos estar en los gobiernos para garantizar nuestras políticas"

Ramírez de los Ríos vuelve a liderar la plancha de Vox para representar los intereses de Córdoba en el Congreso, donde su partido aspira a «ser fundamental para que el cambio político se consolide».

¿Por qué hay que votar a Vox el próximo domingo? 

Porque PSOE y PP han llevado a cabo en España prácticamente las mismas políticas desde 2004. Eso ha dado lugar a un empeoramiento de nuestro sistema político, a que la gente desconfíe muchísimo de la política y a que vean que nuestro partido puede servir para mejorar la vida de los españoles. Vox es el único partido con propuestas totalmente diferentes. Por ejemplo, nosotros no aceptamos el marco de la Agenda 2030, eso indica ya que hay una alternativa a esas políticas. Muchos aspectos de los programas del resto de partidos acerca del aborto, la eutanasia o la violencia de género, desde partidos de extrema izquierda hasta el Partido Popular comparten en un 90 por ciento el programa. Nosotros nos diferenciamos de una manera muy nítida de todo eso y, además, abordamos los problemas reales de los españoles, problemas de los que no se suele hablar, como por ejemplo de la crisis de natalidad.

Si se extrapolase el voto de las pasadas municipales Vox perdería su escaño por Córdoba ¿Le preocupa esa posibilidad? 

No. Nosotros tenemos un tipo de voto que se ha diferenciado siempre muchísimo de las municipales a las generales. En las pasadas municipales creo que estuvimos en Córdoba en torno a unos 12.000 votos y luego en las últimas generales logramos 82.000. Hay una diferencia absolutamente clara, nítida. Vox, evidentemente, tiene un proyecto muy centrado en lo nacional y creo que así nos identifica muchísima gente. Cuando llegan las municipales mucha gente que votó en las municipales a PSOE, Podemos incluso, o PP nos confía su voto.

Su partido rehusó entrar en 2018 en el gobierno de la Junta y en 2019 en el Ayuntamiento de Córdoba ¿por qué esa insistencia ahora por formar parte de todos los gobiernos donde sean decisivos? 

Se debe básicamente a la respuesta que ha habido a nuestra generosidad. Nosotros en pasadas elecciones no hemos impuesto nunca ocupar cargos o exigir consejerías. Lo que sí pedíamos era el cambio de políticas. ¿Cuál ha sido el problema? Pues que esos cambios no se han producido. El Partido Popular, que es con el que hemos llegado a esos acuerdos no ha cumplido. Ha habido muy pocas cosas de las que hayamos firmado en acuerdo programáticos que se hayan llevado a efecto. Entonces no tenemos más remedio, para garantizar que nuestras políticas se cumplan, que formar parte de esos gobiernos. 

La izquierda ha pasado de agitar el miedo a que viene el PP a la repulsa por los pactos con Vox, ¿qué defensa cabe ante quienes os califican de partido de ultraderecha, homófobo o machista?  

Uno de los problemas principales que tenemos en España es que la izquierda considera que puede decir cualquier barbaridad y que su electorado se lo va a tragar sin más. Durante esta campaña han agitado el miedo a que somos el partido enemigo de las mujeres, y lo ha hecho un gobierno que ha dejado a 200 violadores en la calle y que ha reducido las penas a 2.000 agresores sexuales. Al final la realidad termina imponiéndose. Nos llaman xenófobos y nuestro anterior secretario general, Ortega Smith, es hijo de una argentina y está casado con una mejicana. Somos racistas y nuestro secretario general actual es hijo de madre guineana. Somos terriblemente machistas y aquí en Córdoba, por poner un ejemplo, salvo yo, que debo ser la cuota masculina autorizada, todo lo demás han sido candidatas.

¿Qué proyectos va a defender para Córdoba en el Congreso? 

Córdoba tiene un problema muy importante de infraestructuras, que hay que resolver. No hay suficiente potencia eléctrica en grandes zonas y eso impide el desarrollo de nuestras industrias. Es fundamental que se invierta en la red eléctrica española para que afianzar las industrias que hay en Rute, Lucena, Puente Genil o Cabra. En este último municipio no se han podido entregar ni siquiera planeamientos urbanísticos para hacer viviendas por falta de energía. Necesitamos también mejorar mucho las infraestructuras hidráulicas. Ahora mismo, en el norte de la provincia hay 80.000 personas que no tienen aguara para consumo humano. Eso debería avergonzar a todas las personas que han tenido algo que ver, desde la administración de las confederaciones hidrográficas, la Diputación de Córdoba o la Junta Andalucía. Por otro lado es imprescindible que proyectos como el desdoble de la N-432 se lleve a cabo, es una infraestructura de la que se lleva hablando décadas, prácticamente cada campaña electoral, y sin embargo no se ha hecho nada. En carreteras hay grandes carencias, al estado de la A-4 me remito. No puede ser que la arteria principal de la provincia tenga serios problemas de asfaltado. También tenemos que conseguir el número agentes de Policía Nacional y Guardia Civil en la provincia, porque hay grandes zonas que no tienen garantizada su cobertura.

Como diputado por Córdoba, ¿en qué ha fallado el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos a la provincia en estos últimos cuatro años? 

Aparte de todas las traiciones a los españoles, de las que somos partícipes también los cordobeses, está no haber hecho ningún tipo de inversión importante en una época de presupuestos expansivos debido a la inflación y a dispararse la recaudación, con unos presupuestos generales de récord. Pues ni así nos hemos encontrado con una inversión ni medio normal para la provincia de Córdoba. 

La migración se alza para muchos como la solución ante la España vaciada, la baja natalidad y la falta de mano de obra en el campo. ¿Cuál es el planteamiento de su partido al respecto? 

Nosotros defendemos que hay que hacer programas importantes para mejorar la natalidad en España. Sabemos que la solución a la crisis de natalidad es a la largo plazo y que va a haber un periodo en el que vamos a necesitar inmigración. Pero queremos que sea ordenada, que permita resolver los problemas de las empresas españolas, traer gente que se pueda integrar y hemos podido ver por casos en Europa qué gente es más fácil que se integre. No hemos visto manifestaciones en contra en contra de la inmigración china pero sí de otros orígenes que han dado más problemas. Estamos a favor de traer gente con la que compartamos cultura. Pero es muy importante que la gente entienda que incluso estas personas que vengan no van a tener el mismo tipo de implicación que tiene una persona que nace aquí.

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