Selección española

El 'coach' que encendió la luz de Morata: "Es una gran persona que vive su mejor momento"

Adrià Carmona, la joya de su generación en la cantera del Barça, se retiró a los 30 años por las lesiones y el desgaste de su profesión

Ejerce de 'coach' de futbolistas como el delantero de la selección, quien confiesa que sus sesiones han disparado su autoconfianza

Álvaro Morata celebra un gol con la selección española ante Georgia.

Álvaro Morata celebra un gol con la selección española ante Georgia. / EFE

Denís Iglesias

Detrás del éxito de Álvaro Morata, jugador del Atlético y capitán de la selección española, hay una red de seguridad que le soporta, con la polisemia que implica el verbo, y que le hace "encender la tecla del interruptor" en "un momento que viene cuando viene". Esta reflexión para El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, nace de Adrià Carmona (Igualada, 1992), exfutbolista profesional, la joya de su generación en la cantera del Barça, que acompaña al delantero desde 'coaching'. Juntos han conseguido que se encienda una luz que exhibe la madurez de uno de los arietes más en forma de Europa con 10 goles en 10 partidos.

"Se habla mucho del momento espectacular que está viviendo como futbolista, pero hay que darle valor a lo que es como persona", reivindica un profesional que habla con la sensibilidad y profundidad que le dan las experiencias vividas. Carmona se retiró en septiembre de 2022 a los 30 años después de una carrera agitada. Además de en la Masia, estuvo en el Milan, Real Zaragoza, Girona, Espanyol B, Albacete, CD Lugo, en clubes de la India o L'Hospitalet. También fue campeón de Europa sub-17 en 2008.

Adrià Carmona, en su etapa en el Juvenil A del FC Barcelona.

Adrià Carmona, en su etapa en el Juvenil A del FC Barcelona. / EFE

Lamine Yamal y el cuidado con los jóvenes

Las lesiones y el agotamiento le hicieron dejar el verde. "Pasé un duelo. Antes de retirarme yo estaba en un momento duro en lo profesional y lo personal. De llegar arriba a jugar campos de Segunda B muy diferentes. No tan profesionales. Todo es cuestión de adaptación. Ese 'otro fútbol' tiene su encanto, pero no era capaz de digerirlo", confiesa Carmona.

Se reconcilió con el balón a través del 'coaching', una herramienta para la que se formó y que le ha hecho ganar interés por un deporte que, pese a practicarlo desde que tenía uso de razón, nunca le preocupó más allá de la rutina como jugador. "Me di cuenta que las había vivido de todos los colores. Desde ser el destacado de la cantera del Barça hasta sufrir descensos. Con lesiones de por medio y muchas cosas que afectan a la mentalidad del jugador", rememora.

Carmona detectó una falla en el sistema profesional que él cubrió, primero desde el autoaprendizaje, y después con el estudio. "Nos faltaban herramientas para lo más importante, que es canalizar las emociones de modo natural", explica alguien que ya estando en activo empezó a construir el futuro que hoy vive. Además de Álvaro Morata, ha trabajado tanto física como remotamente con Sergi Roberto, Marc Muniesa (excompañeros en el Barça), Arthur Melo o Ferreira Carrasco.

Pero también ha acompañado a futbolistas en formación, que, como en el caso de Lamine Yamal, pasan de promesas a estrellas de un día para otro. "Por suerte o por desgracia estamos en un mundo frenético. Gracias a esa vorágine aparecen jugadores como Lamine. Ojalá todo vaya bien, pero hay que tener cuidado. Creo que Xavi le está dosificando bien. Ya se ve que va a marcar época, aunque es necesario recordar que tiene 16 años. No sería el primero ni será el último al que nos 'cargamos", apunta Carmona sobre un futbolista que se incorporó a la concentración con molestias, después de ser sustituido en Granada.

La lección a Morata para afrontar el Mundial

Este es uno de los múltiples casos que analiza el 'coach deportivo', vocación que descubrió un día en el que a él también se le encendió la bombilla. "Mi primera gran reflexión sobre este tema llega en un mercado de verano. En los que esperas esa oportunidad. Empiezo a verme en diferentes escenarios. Pero, por otro lado, me imagino en una vía en la que echo un cable a jugadores. Eso me ponía la piel de gallina. A día de hoy siento mucha satisfacción", reflexiona un futbolista -porque sigue pensando como tal- que tiene en Álvaro Morata a uno de sus múltiples casos de evolución positiva.

Así lo verbalizaba el propio delantero de la selección después de anotar un gol contra Alemania en la segunda jornada de la fase de grupos del Mundial. Un tanto que llegó después de salir del banquillo, con el doble valor que ello implica. "Yo lo he preparado con mi 'coach', Adri (Carmona). Visualizamos los dos partidos: titular o suplente, con todo lo que ello supone. Desde las celebraciones de los goles hasta, si eres suplente, tu modo de apoyar a los compañeros. Si ya lo has vivido antes es más fácil de gestionar", explicaba Morata en una entrevista con la 'Cadena Cope'.

"Cuando sabes todo lo que has trabajado, en una relación profesional que se vuelve personal, y ves cómo un jugador le da la vuelta al partido... ¡Te da una satisfacción y un orgullo! ¡Parece que estás jugando tú! Yo lo digo siempre: no veía fútbol. Para mí era suficiente con entrenar y analizar un poco al rival. Ahora me 'como' partidos de todos los sitios, porque quiero", explica Carmona sobre el intercambio de experiencias que le provoca su nuevo rol.

El valor de asumir galones y la capitanía de la selección

Una profesión compleja, donde cada perfil tiene una particularidad, según la posición, edad, trayectoria... Aunque con puntos en común, como la gestión de la imagen pública o la presión ante las críticas. En el ejemplo de Morata, el trabajo específico le ha permitido superar etiquetas que aludían a su falta de puntería o mal posicionamiento. Para ello, según él mismo confesó, utilizó este método que le aconsejó Carmona: "Ve a la clase de tus hijos y quédate 20 minutos. Deja que te hagan todo tipo de preguntas. Cuando te insulten, recuerda sus caras y que tienen el mismo nivel e importancia que esos niños".

Álvaro Morata, segundo por la izquierda, durante la lectura del comunicado por el caso Rubiales.

Álvaro Morata, segundo por la izquierda, durante la lectura del comunicado por el caso Rubiales. / EFE

A este tipo de soluciones, 'coach' y futbolista llegan de modo conjunto. A veces, ni siquiera la sesión que Carmona considera más importante es clave en el rendimiento. Es un sistema libre de enseñanzas mutuas, que con Morata ha terminado en una simbiosis. "Ha dado una progresión espectacular. En el sentido de que está llegando a una edad cumbre. Ahora le están dando más altavoz, por todo su desarrollo goleador. Aunque él siempre ha antepuesto el bien colectivo a lo individual. Su carrera habla por sí sola. Ha tenido un prisma de mejora constante", reivindica el especialista.

"El tema de la capitanía y los galones ha sido fruto del crecimiento. No aceptas ese rol si no estás preparado. Lo más espectacular es que él siempre predica con el ejemplo. Está pendiente de los más jóvenes. Es generoso", destaca Carmona. Esto es fácilmente comprobable en cualquier concentración de la selección, donde el jugador del Atlético se para a saludar a todos los medios y trata con consideración a sus compañeros. Lo hace desde el combate a su timidez, pero con la educación y el respeto ganados.

"Una vida siete veces la de una persona normal"

Desde su nuevo estatus, Morata asumió la lectura del comunicado sobre el caso Rubiales. Un instante crítico, fiscalizado por miles de miradas, en el que puso voz y rostro. "El momento de cada uno llega si se trabaja. Del mismo modo que considero que las cifras han sido el inicio de todo, siempre han estado ahí. Álvaro nunca ha dejado de ser un goleador, aunque en escaparates muy difíciles como el Real Madrid, Chelsea, Juventus... Siempre con grandes jugadores. Ser artillero de esas banderas es una película diferente cada domingo. No porque lleves 20 tantos vas a marcar en ese partido", concluye Carmona.

Álvaro Morata y Rodri Hernández, durante la celebración de la Nations League.

Álvaro Morata y Rodri Hernández, durante la celebración de la Nations League. / EFE

Su labor, además del 'coaching', ha permitido humanizar a los futbolistas. Tanto con el recorrido vital propio y confesado, como con las actitudes que revelan los profesionales que pasan por su consulta y a los que ha enriquecido. "Hay una frase de Valdano que dice: 'El que sólo sabe de una cosa no sabe de nada'. Por eso es importante conseguir la excelencia con equilibrio. A veces nos olvidamos de que los futbolistas son personas normales. Con sus miedos, limitaciones, creencias... Hay que aprender a pedir y tener esa ayuda", sentencia el 'coach' que encendió la luz de Morata para acompañarle "en una vida que, como la del resto de sus compañeros, es siete veces la de una persona normal".