Con esa alteración de los sentidos que precede a los episodios trascendentes, el Córdoba Futsal Patrimonio de la Humanidad apura las vísperas de un partido señalado. El choque ante el Industrias Santa Coloma, un clásico de la Primera División (martes, 20.30 horas, sin televisión), depara para el vencedor un billete en la Final a Cuatro de la Copa del Rey. Los cordobeses han ido rompiendo su techo en esta competición a lo largo del curso y ahora quieren más. Lo tienen al alcance, pero nadie se fía. De puertas para adentro se detecta la ambición por crecer y la importancia de la oportunidad; en el entorno, la expectación es mayúscula. "Tenemos el lujo de jugar en Vista Alegre", recalca Josan González, entrenador cordobesista.
"Tendremos enfrente a un rival que viene en una gran dinámica y será un partido muy duro", advierte un técnico que intenta atornillar en las sesiones de lunes y martes -el mismo día del partido- conceptos que ya están muy asumidos. "Ahora no da mucho tiempo a entrenar y el día a día se convierte en un repaso de las herramientas que el equipo tiene y que ha ido generando desde la pretemporada en agosto", explica el pontanés, quien subraya que son "conscientes" de que tienen un "repertorio amplio de armas tanto defensivas como ofensivas", además de sentirse "totalmente preparados a nivel mental para afrontar este reto".
Al amparo de Vista Alegre, el Córdoba Futsal ha sido protagonista de varios episodios memorables. Ahora confía en reeditarlos en un encuentro que guarda para el vencedor una recompensa magnífica. "Tenemos que estar preparados, con la tranquilidad de saber que si mostramos nuestra identidad en la pista vamos a tener mucha chance de ganar y pasar la eliminatoria", apunta Josan. Sería la primera vez para los suyos ante un Industrias Santa Coloma que estuvo presente en la edición del pasado año y cayó en semifinales ante el Movistar Inter, posteriormente campeón.
"Debemos tener el control de cada situación que se produzca en el partido. Será determinante que sepamos leer cada momento y desde ahí, con el trabajo que llevamos desarrollando toda la temporada, sacarlo adelante", expone a modo de receta González, que saca a relucir el valor de la escalada del club. "Hay que recordar que este es el tercer año que estamos en Primera División, que día a día vamos dando pasos adelante y que el objetivo de la directiva y del club es que la ciudad de Córdoba se sienta identificada con el proyecto, que se ilusione", manifiesta. Su máximo deseo ahora es "que cuando termine el partido toda la afición de Córdoba y su provincia sea feliz". Si es con el conjunto blanquiverde entre los cuatro mejores de la Copa, los abrazos estarán garantizados.
