La última jornada del 2021 de la Plata masculina de balonmano se celebra este sábado con dos partidos para los conjuntos del Córdoba Balonmano, ya que el Deza BM femenino recibirá al Antequera a las 19.30 horas y el Cajasur Córdoba BM masculino jugará 30 minutos más tarde en la pista del Sarriá. El Itea Córdoba femenino iba a regresar este domingo a la competición tras tres semanas de ausencia. Sin embargo, el duelo Itea-Universidad de Granada han acordado ambos clubs aplazarlo ante la situación actual de repunte de los casos de covid-19.
Deza-Antequera
El Deza BM afronta su segundo duelo consecutivo en casa ante el Antequera Costa del Sol. Las granates abren la segunda vuelta con un complicado partido ante un equipo situado en la zona media, que le aventaja en 7 puntos, pero al que fue capaz de sacarle un empate en el duelo inaugural liguero disputado en septiembre en el Fernando Argüelles (22-22). El duelo se disputará en Fátima a las 19.30 horas con el arbitraje de la pareja extremeña formada por Jiménez Tejada y Sierra Bordallo.
El técnico del Deza, Mario Ortiz, ha pedido a sus jugadoras que mejoren su nivel con respecto al partido de la pasada jornada, en el que perdieron por 16-24 ante el Roquetas Bahía de Almería, al asegurar que “tenemos que ser más regulares e inteligentes a la hora de manejar los partidos, pues si desconectamos y tenemos la actitud de la semana pasada, no podremos sacar puntos ni contra Málaga ni ningún equipo más”.
Sarriá-Cajasur
El Cajasur CBM afronta su primer desplazamiento de la segunda vuelta de la primera fase, que le lleva a tierras catalanas, donde se medirá a la Unió Esportiva Sarriá. El cuadro gerundense es penúltimo, con tres puntos menos que los cordobeses pero dos partidos menos disputados, por lo que el partido se antoja vital para la realidad actual de los de Escribano, que no es otra que la lucha por la permanencia. El duelo se jugará el sábado a partir de las 20.00 horas con el arbitraje de la pareja gallega formada por Eiras Abalde y Crespo Gómez.
Tres de los últimos cuatro puntos ha conseguido sacar el Cajasur CBM en los dos duelos seguidos que ha disputado en Fátima ante rivales de la zona baja de la tabla. Ahora toca afrontar el escollo del Sarriá, un equipo reforzado en cuanto a su moral por la victoria que consiguió la pasada semana en la pista del Sant Quirze y que querrá alargar su racha.
Sobre el rival y el partido, el técnico granate, Jesús Escribano, señaló que “para los dos equipos es una final, una final muy extraña porque jugarán a puerta cerrada, lo cual hace el duelo más frío. Sí es cierto que ellos recuperan a los sancionados y que en casa están haciendo partidos muy buenos y vienen con la moral por las nubes tras vencer en Sant Quirze con un partido muy serio”.
