Primavera festiva

El Consejo Regulador de Montilla-Moriles suspende la Cata por sorpresa a dos semanas de su celebración

La celebración se aplaza sin fecha concreta para, según el organismo, proponer "un nuevo modelo"

Ambiente en la Cata del Vino en la plaza de toros.

Ambiente en la Cata del Vino en la plaza de toros. / Francisco González

Rafael Verdú

Rafael Verdú

Córdoba no podrá celebrar este año la primera de las grandes celebraciones del Mayo Festivo, la Cata de los Vinos de Montilla-Moriles. El Consejo Regulador ha informado en la mañana de este martes de que la fiesta se suspende sin que haya una fecha definida aún para retomarla. Los motivos alegados a través de un comunicado aluden a la necesidad de buscar un nuevo modelo de Cata que potencie el negocio de los bodegueros, así como a "cuestiones ligadas al espacio", que desde el año pasado es la plaza de toros de Los Califas.

A través de dicha nota, el Consejo manifiesta que las bodegas y cooperativas participantes quieren "acercar a Córdoba un nuevo modelo de Cata que cumpla con las expectativas, actuales y futuras, de los amantes de los vinos de Montilla-Moriles, así como del resto de personas neófitas que se acercan a aquella buscando iniciarse en el maravilloso mundo de los vinos generosos cordobeses".

Preguntado al respecto por este medio, el presidente del Consejo Regulador de la DO, Javier Martín, ha aclarado algunos aspectos sobre la repentina suspensión de una cita ya tradicional que está a punto de celebrar cuatro décadas de vida. El primero de ellos tiene que ver con la ubicación del año pasado, que iba a repetirse esta primavera. "Resultó un éxito pero sólo permite una cita de las de siempre, no un lugar de encuentro con expertos y posibles compradores", asegura. Es decir, la plaza de toros no es un lugar para que los bodegueros hagan negocio.

Existe la opción del flamante Centro de Ferias del Parque Joyero, que permite conjugar ambas facetas, la lúdica y la económica. Sin embargo, Martín tampoco lo ve apropiado por su lejanía. El responsable del Consejo manifiesta que "si se quiere, y lógicamente se quiere, que la Cata sea el lugar de encuentro de siempre, tiene que estar en un sitio ubicado en el Centro de la ciudad". Por ese mismo motivo tampoco convence el recinto ferial del Arenal, otra alternativa a la explanada de la Diputación.

Posibles fechas

Una segunda cuestión sobre la que se pronuncia Martín es la posible fecha de celebración de la Cata Montilla-Moriles para este año. Podría ser a finales de octubre o comienzos de noviembre, apunta, si bien "eso todavía no lo sabemos". A partir de la semana que viene los bodegueros que participan en el evento mantendrán reuniones periódicas para redefinir un modelo de Cata al gusto de todos. Y eso llevará su tiempo.

El organismo que regula el marco Montilla-Moriles mantiene que para buscar una solución "ha llevado a la conclusión de hacer una parada técnica para coger impulso y proponer nuevos retos para la promoción de los vinos de Montilla-Moriles en esta cita". Por todo ello, "el Consejo Regulador y las bodegas participantes proponen, manteniendo su compromiso con Córdoba y con las administraciones locales y regionales, que tanto apoyo nos han procurado durante todos estos años, posponer la celebración de la 39 edición de la Cata del Vino Montilla-Moriles para lograr que todos los actores se sientan representados, dando mayor brillantez a la promoción de nuestros vinos, en conjunción con la excelente gastronomía cordobesa presente en la misma".

La Cata del Vino de Montilla-Moriles se ha convertido ya por derecho propio en un referente de las fiestas de mayo de la capital cordobesa. Para hacerse una idea de su magnitud, se puede tener en cuenta que el año pasado se agotaron en pocas horas todas las entradas previstas para algunas de las sesiones, que se celebraron con un aforo limitado debido a las condiciones del recinto. Y en 2016 se hizo público un estudio que valoraba el impacto económico de la celebración en la ciudad: más de 2,1 millones de euros de entonces.