Tres enfermedades que se combaten comiendo cebolla

Una hortaliza tachada habitualmente de humilde pero que se encuentra presente como un ingrediente sencillamente imprescindible en la mayoría de cocinas de todo el mundo: la cebolla no solo añade sabor y aroma a nuestras recetas, sino que también destaca por ser un poderoso elixir para la salud.

Históricamente siempre se le han atribuido propiedades medicinales o curativas a la cebolla, pero la ciencia moderna ha dado en el clavo y ha estudiado por qué es realmente tan beneficiosa para nuestro cuerpo.

Estas son las tres enfermedades que se combaten con remolacha

Además de un elemento esencial de la gastronomía, la cebolla es fuente de una amplia variedad de nutrientes esenciales entre los que se encuentran vitaminas, antioxidantes, minerales o fibra.

El consumo de cebolla, si bien no garantiza por si solo una dieta equilibrado o una buena salud, sí ayuda a fortalecer el sistema inmunológico así como a la salud ósea o la digestión.

En el día a día podemos encontrarla cruda como parte de los ingredientes de una buena ensalada: salteada en platos a la plancha o a la sartén o cocida en sopas y guisos.

Estas son las tres enfermedades que se combaten con cola de caballo

Diabetes

Una de las aplicaciones más desconocidas de la cebolla es para controlar la diabetes: gracias a que contiene una sustancia llamada glucoquinina (conocida en algunos entornos como 'insulina vegetal') ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre.

Por otra parte, su contenido de flavonoides como la quercetina puede tener beneficiosos efectos en la resistencia a la insulina o la salud cardiovascular.

Enfermedades respiratorias

Desde la antigüedad siempre se le ha dado a la cebolla un uso como remedio natural para combatir enfermedades respiratorias como asma, bronquitis o tos gracias a sus propiedades expectorantes o antiiflamatorias.

Comer pistacho: el hábito que combate estas tres enfermedades

El consumo de cebolla cuando padecemos alguno de estos cuadros puede ayudarnos a aliviar la congestión nasal, a desinflamar las vías respiratorias y a facilitar la respiración.

Problemas dermatológicos

Otra de las razones por las que la cebolla es un ingrediente muy cotizado en ámbitos distintos a la cocina es por su riqueza en compuestos como el silicio o el colágeno: dos elementos fundamentales a la hora de mantener la salud de la piel.

Además de estos, el azufre también puede ayudar a prevenir problemas cutáneos o a favorecer la cicatrización de las heridas.