Si por algo es conocida Córdoba a nivel nacional e internacional es por su rico pasado andalusí. Capital de Al-Ándalus, la capital fue el centro neurálgico del califato omeya y una de las metrópolis más importantes del mundo. No obstante, este esplendoroso pasado impide en muchas ocasiones contemplar y conocer el legado medieval y cristiano, especialmente en los pueblos de la provincia. Castillos, iglesias, murallas... el listado es prácticamente infinito. Para ponerlos en valor, te contamos tres de los pueblos medievales más bonitos de Córdoba.

Almodóvar del Río

Empezamos por el más popular y todo un imprescindible en este listado. Su castillo es todo un símbolo; una fortaleza de origen íbero, pasado andalusí, fue con la conquista de Fernando III y se incorporaron a la Corona de Castilla cuando este recinto vivió su época de mayor esplendor, sufriendo diversas ampliaciones. Fue reconstruido a inicios del siglo XX y en él se han grabado escenas de la serie Juego de Tronos.

Vista panorámica de Almodóvar del Río desde su castillo, en una imagen de archivo. Francisco González

Al margen del castillo, pasear por sus calles es toda una experiencia que nos retrotrae a otra época. También se puede destacar la iglesia de la Inmaculada Concepción (del siglo XV), la Casa Señorial de los Natera (actual Ateneo Popular), la Capilla del Hospital de la Caridad, la Ermita del Rosario y San Sebastián; y el antiguo Ayuntamiento (actual biblioteca municipal).

Carcabuey

Toca irse a la Subbética para conocer una de las fortalezas hispanomusulmanas más impresionantes del país. El castillo de Carcabuey tiene su origen en el siglo IX, aunque fue bajo el dominio cristiano cuando adquirió mayor entidad, sufriendo importantes reformas de calado entre los siglos XIV y XVIII. Es un imponente edificio de piedra caliza ubicado en la cima del cerro. En su interior se encuentra una ermita de estilo barroco.

Imagen del castillo de Carcabuey. CÓRDOBA

Además de recorrer sus calles, dejarte llevar por ellas, y disfrutar del paraje natural en el que se encuentran, también destacan sus templos como la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, ermita de Santa Ana, o el templete de la Virgen de las Angustias, que fueron construidos entre los siglos XIV y XVIII.

Aguilar de la Frontera

En un listado que podría ser más extenso, sí o sí hay que incluir a una localidad de la Campiña. En este caso Aguilar de la Frontera, que destaca la zona más antigua de la ciudad, llamada La Villa, que estaba rodeada por una muralla y donde se encuentran los principales puntos de interés. De Aguilar hay que mencionar la plaza de San José, de corte neoclásico, la Torre del Reloj del siglo XVIII y, por supuesto, sus casas señoriales, entre las que destaca la de la calle Pozuelo, de 1574.

En cuanto a los templos, la parroquia de Nuestra Señora del Soterraño, de Nuestra Señora del Carmen y la iglesia de la Veracruz son otros lugares imperdibles y que nos hablan del pasado medieval del municipio.