El inconformismo es un concepto que se aplica en toda regla a la sociedad del siglo XXI; siempre queremos más. Por ejemplo, a la hora de emplear nuestro tiempo libre, de pasar nuestras vacaciones o de vivir nuevas experiencias, nos gusta la novedad. Es por ello que cada vez son más las opciones de desconexión que tenemos. De hecho, una de las que más está triunfando en la actualidad son los hoteles burbuja.

Los hoteles burbuja representan un nuevo modelo de hostelería completamente revolucionario. De este modo, su meta es que el cliente no necesite salir de la habitación para disfrutar del entorno rural; así como pretende ofrecerle un gran nivel de privacidad. Esta tendencia proviene del glamping (combinación de glamour y camping) y te ofrece la posibilidad de deleitarte a través de la naturaleza, pero sin que tengas que dejar la cama para ello. 

¿Cómo funcionan los hoteles burbuja?

En una habitación transparente, inflable, esférica y totalmente climatizada, los huéspedes pueden disfrutar de las vistas sin preocuparse por los bichos y las temperaturas externas. Además, estos hoteles son impermeables y resistentes a los rayos UV.

Por otro lado, su exterior –de plástico- se sostiene debido a la diferencia de presión que existe con respecto al interior de la burbuja. Una bomba de aire la mantiene inflada y regenera constantemente el aire de dentro. Asimismo, incluye un sistema especializado que impide la pérdida de visibilidad que podría ocasionar el contraste térmico.

El precio varía en función de las características y la ubicación del enclave donde se sitúe el servicio, pero, aproximadamente, suele ir de 200 a 400 euros por noche

¿Quieres dormir en un hotel burbuja? Ahora también en Andalucía.

Si te lo estás plateando seriamente, no necesitas salir de Andalucía para dormir a pierna suelta y observar las estrellas desde la cama. Por ahora, en Andalucía hay dos hoteles burbuja.

-Luxury Dome Retreat. Este hotel se encuentra en Dudar, un municipio a 14 kilómetros de la provincia de Granada. La estructura del alojamiento parece imitar a un iglú nórdico que puede acoger hasta a cuatro personas dentro. Está dotado de chimenea, restaurante, solárium, cocina, jardín e incluso piscina con vistas. Por lo tanto, sus instalaciones están preparadas tanto para el invierno como para el verano. Por otro lado, no hay una edad mínima para entrar al hotel, por lo que cualquiera puede ser cliente.

-Nomading Camp Ronda. Este hotel consta de burbujas de unos 20 metros cuadrados situadas en medio de un olivar y rodeadas por olivos centenarios. Los alojamientos cuentan con techo transparente, calefacción, aire acondicionado, jardín privado para cada esfera y telescopio para observar las estrellas. Además, el hotel se encuentra ubicado cerca de la Venta “El Abogao”, dentro la bella localidad de Ronda, en Málaga.