FECHA: 16 de septiembre de 1962.

LUGAR: Estadio Municipal El Arcángel.

PARTIDO: Córdoba CF - Real Valladolid (jornada 1 del campeonato nacional de liga de Primera División, 1-0).

LA SITUACIÓN

El Córdoba CF se estrenaba en El Arcángel como equipo de Primera División, apenas unos meses después de la hazaña del Colombino (0-4) y con la base de la plantilla que cruzó el umbral hacia la élite. No hay grabaciones de aquel día. En esos tiempos solo aparecías, con suerte, en el NO-DO (Noticiario y Documentales Cinematográficos, un espacio que entre 1942 y 1976 se proyectaba de forma obligatoria en los cines españoles antes de la película) si jugabas contra el Real Madrid.

La Liga 62-63 amanecía dibujada entre incógnitas. ¿Sería capaz el Córdoba de moverse ente los grandes? Con Roque Olsen en el banquillo, el plantel disponía de piezas de referencia como el central José Luis Navarro -que había llegado con eL club en Tercera-, Simonet, Vázquez o el marroquí Riaji. Pero destacaba especialmente un polivalente medio de 22 años, Juanín, un joven que había llegado dos cursos antes desde el Extremadura y pasó por la cantera del Betis.

¿QUÉ OCURRIÓ?

“Le pegué fuerte, desde el punto de penalti, en la portería del Gol Sur…”, rememoraba el añorado Juanín (Nerva, 1940-Córdoba, 2013), en un reportaje publicado por El Día de Córdoba en 2007, justo 45 años después de la efeméride. “Más que la forma en que rematé, o la jugada, recuerdo la gran alegría que me produjo al ver cómo se celebraba en El Arcángel. Aquel fue un momento indescriptible, que nunca olvidaré. Éramos nuevos en Primera y toda la ciudad estaba pendiente de nosotros después del ascenso. Debutamos en Primera y ganamos. ¿Qué más podíamos pedir?”, explicaba el añorado futbolista.

Benegas, Simonet, Mingorance, Navarro, Martínez, Marañón, Riaji, Juanín, Miralles, Vázquez y Homar fueron los componentes de un once memorable. En el minuto 59, Juanín batió al conjunto pucelano que entrenaba el histórico ex barcelonista Ramallets. 1-0 y primera victoria en Primera. El paso inicial de lo que fue la edad de oro del club.

¿QUÉ PASÓ DESPUÉS?

El Córdoba se salvó esta temporada de estreno en Primera. Concluyó en el puesto décimo segundo en un campeonato con 16 equipos en el que terminaron descendiendo el Málaga y el Osasuna. El Valladolid, rival del debut, no era malo: acabó cuarto, con el Real Madrid campeón y el Atlético segundo.

¿Y el goleador de aquella tarde? Juanín se erigió en el líder de manera natural, sin tener que alzar la voz. Sus compañeros le reverenciaban como a un veterano, cuestión en la que seguramente le ayudó una alopecia precoz que le confería un aire de madurez que se hizo más notorio cuando el brazalete de capitán adornó su brazo derecho. Fue uno de los pilares del mejor Córdoba en sus más de sesenta años de existencia, ése que fue quinto en la Liga 64-65 y que aún posee un récord insuperable en España: invicto toda la campaña en El Arcángel y con sólo dos goles encajados al calor de su hogar.

Juanín defendió el escudo blanquiverde durante casi dos décadas (desde 1960 hasta 1979). Luego desempeñó labores técnicas, siendo segundo del brasileño Vavá y de Roque Olsen, asumiendo el mando absoluto de la plantilla durante efímeras etapas en Segunda B. Desde 1962 a 1969 jugó siete temporadas consecutivas en Primera División con el Córdoba. Disputó un total de 318 partidos oficiales, marcando 77 tantos en total. Hizo 44 en Primera, una marca que le sitúa como el mejor goleador cordobesista en la máxima categoría. Jamás fue amonestado en toda su carrera. El club recibió ofertas para traspasarlo, pero nunca se movió del Córdoba.

Juanín falleció el 26 de marzo de 2013. Se anunció desde el Ayuntamiento que le dedicarían una calle de la ciudad. El club presentó por entonces un proyecto de ciudad deportiva con el nombre del legendario 8. Más tarde, se incluyó su nombre entre los imprescindibles del Córdoba para que fuese homenajeado con una puerta especial en El Arcángel. De todo eso no ha habido nada. Pero Juanín vive cada vez que un aficionado pronuncia su nombre y se estremece con el recuerdo de sus días de gloria en aquella Córdoba en blanco y negro.