El Real Madrid tiene una nueva pista talismán para sus categorías inferiores, pues no para de ganar títulos en el Torneo Mezquita de baloncesto cadete. Tras dar una exhibición en las dos ediciones anteriores de la mano del base esloveno Luka Doncic, en esta ocasión ha vuelto a ganar aunque ya no haya venido su promesa balcánica.

El conjunto merengue aplastó a todos sus rivales con marcadores de 85--40 ante la selección cordobesa, de 81--61 contra el Unicaja y de 79--54 frente al Barcelona. Nadie resistió los envites de los cadetes madridistas. El lituano Thomas Balciunas destacó sobre todos los demás jugadores participantes por sus números finales y su capacidad resolutiva en los momentos clave, aunque muchos de sus compañeros tuvieron un desempeño muy similar. Cinco jugadores estuvieron por encima de los diez puntos en el encuentro ante el Barça, lo que dice mucho de la capacidad de un Real Madrid con muchos extranjeros en sus filas y un intimidador aspecto ante la lucha por el título nacional cadete. De momento, ya le dejó un mensaje claro a un Barcelona que tuvo a sus mejores jugadores en el base-escolta serbio Andrija Marjanovic -23 puntos ante el Real Madrid- y el versátil alero Sergi Martínez.

El Barcelona ocupó la segunda plaza al ganar sus otros dos encuentros ante Córdoba (94--52) y Unicaja (74--65). Mientras, el Unicaja terminó tercero al superar a Córdoba por 75--63. La selección cordobesa, dirigida por Antonio Sánchez, hizo lo que pudo ante tres rivales muy superiores.

Los trofeos individuales fueron para Thomas Balciunas (mejor jugador y máximo reboteador) y Dino Radoncic (máximo asistente), ambos del Real Madrid. Mientras, el trofeo al máximo anotador fue para Nacho Rosa, del Unicaja de Málaga.

Más de quinientos espectadores acudieron a Vista Alegre para ver la jornada de clausura y disfrutar con el talento de estos jóvenes jugadores con un gran futuro por delante. El Bball acertó de nuevo al traer a Córdoba este evento referente ya en el calendario deportivo local.