El 'caso Iván Robles' en el Córdoba CF, tras un triste giro de los acontecimientos, toca a su fin tras el anuncio oficial por parte de la entidad blanquiverde de la baja del jugador. El club ha decidido rescindir el contrato del lateral onubense, que actualmente se encuentra lesionado, tras divergencias del agente del futbolista con la entidad blanquiverde, que por un lado necesitaba la ficha que actualmente ocupa el jugador y, por otro, le ofrecía un año más de contrato precisamente por ese contratiempo que sufrió en el primer stage de pretemporada.

La sucesión de los hechos se inicia, precisamente, en Torrox. Allí, Iván Robles se lesiona prácticamente en el primer entrenamiento de pretemporada. Tres días después, los servicios médicos auguran que estará al menos un mes de baja por una rotura en el menisco, aunque después de la operación el tiempo para el alta se alarga hasta enero. Actualmente, Iván Robles ocupa una ficha sénior en el Córdoba CF y ya antes del viaje a Torrox era público y notorio que la dirección deportiva blanquiverde pretendía cederlo a un club de Segunda B, relevándole en el puesto con un jugador sub-23, en este caso Álex Robles. El Córdoba CF entendía que esa ficha sénior debía ser ocupada por un jugador en otra demarcación, preferentemente en el centro del campo. De hecho, el jugador blanquiverde que ocupará dicha ficha será el costamarfileño Djak Traoré.

Los jugadores mandan ánimos a Iván Robles, antes del duelo ante el San Fernando.

Visto lo ocurrido y el contratiempo de su lesión, el Córdoba CF, a pesar de que el jugador cumplía contrato el próximo 30 de junio, le ofreció la renovación por una temporada más con la misma ficha que cobra en la 20-21 y que de esta manera pudiera trabajar con los servicios médicos cordobesistas, así como sus fisios, con tranquilidad. De hecho, según pudo saber este periódico, se le ofreció inscribirlo en filial a fin de que estuviera cubierto y con ficha con un club, aunque siempre entrenaría con el primer equipo. Obviamente, la intención del Córdoba CF era mantener al jugador, renovarle con su mismo sueldo vista la mala suerte de pretemporada y, a partir de enero evaluar la situación: volver a activar la opción de su cesión o, si el primer equipo así lo demandaba, inscribirlo de nuevo en la plantilla de Juan Sabas.

Sin embargo, el agente del jugador no lo ha visto así. El representante solicitó que ese año de renovación que ofreció el Córdoba CF no fuera por el dinero que cobra en la actualidad sino que, en caso de que el equipo lograra el ascenso, cobrara el mínimo interprofesional en Segunda División A, que viene a ser más del doble de lo que actualmente percibe. No solo eso: el representante del futbolista pedía que fuera un jugador de la primera plantilla a todos los efectos, es decir, que además de ese mínimo profesional cobrara también premios y primas. Finalmente, la entidad blanquiverde no solo ha retirado ese ofrecimiento de renovación por un año más, sino que ha informado a Iván Robles de la rescisión unilateral de su contrato, por lo que el asunto, lógicamente, terminará en los tribunales.

El comunicado oficial del club

En el comunicado oficial emitido por el Córdoba CF, el club remarca que "una vez que ha rechazado la oferta de renovación realizada" el futbolista, "por un año más en mejores condiciones económicas que las del contrato actual", la entidad cordobesista "ha decidido rescindir su contrato". El club agradece al futbolista su trabajo y le desea "una pronta recuperación y suerte en sus futuros proyectos deportivos".

"Despedido de la forma más cruel y fría"

Por su parte, el jugador onubense ha lanzado este sábado un comunicado a través de las redes sociales en el que muestra su "sorpresa" porque el viernes fue "despedido por los dirigentes del Córdoba CF de la forma más cruel y fría que un jugador pudiera nunca imaginar, en mi actual situación de baja médica por lesión y a solo dos días del cierre de mercado". Iván Robles informa de que ha sido despedido con un "simple burofax" y asegura que dicho despido está "motivado, única y exclusivamente, por encontrarme de baja médica" y "sin causa legal alguna". Además, el onubense desvela que dicho despido está motivado, a su parecer, "por el triste y simple hecho de querer disponer a toda costa y por cualquier medio mi ficha federativa, retirándome la misma y no haber aceptado un contrato de renovación por un año más con cláusulas leoninas, a modo de manzana envenenada, que truncaba mi futuro como jugador de fútbol".

Finalmente, Iván Robles explica que "después de recibir muchas presiones por los dirigentes del club y no ceder ante una clara injusticia", los dirigentes de la entidad blanquiverde rompían "con todas las ilusiones, esfuerzos y trabajo diario por cumplir mi contrato como profesional de este gran club".

Iván Robles llegó el pasado enero al Córdoba CF, cuando Alfonso Serrano era el director deportivo y siendo aún jugador sub-23. A pesar de que a partir de este verano dejaba de serlo, Serrano decidió firmarle ese medio año y una campaña más. Tras su incorporación a finales del mercado invernal, el lateral onubense participó en cinco encuentros de Liga, sumando 426 minutos en total. Antes del viaje a Torrox era conocido que el Córdoba CF pretendía cederle para liberar una ficha sénior, pero el percance sufrido en el primer entrenamiento del stage cambió el planteamiento en el club, que entendía que debía tratar de manera diferente el asunto. Sin embargo, la relación se ha torcido, al parecer, definitivamente.