El Ayuntamiento de Cabra espera terminar la reforma de la Plaza de España antes de Navidad

Las obras para la reforma de la céntrica Plaza de España de Cabra han comenzado dos semanas antes de lo previsto, lo que permitirá su finalización antes de las próximas Navidades, de acuerdo con la previsión realizada este martes por el alcalde de la ciudad, Fernando Priego. La actuación también supone la integración urbanística del tramo colindante de la avenida José Solís.

Priego ha informado a través de las redes sociales del comienzo de estos trabajos, señalando que los mismos se realizarán por fases, “para que en ningún momento esté toda la plaza levantada, evitando así muchas molestias”. Hace unas semanas fueron informados los hosteleros y los propietarios de los establecimientos comerciales de la zona afectada.

Además, el primer edil ha expresado que en estas obras no se ha contemplado el hacer un aparcamiento subterráneo porque tras los estudios realizados se vio que ni era viable ni técnica ni económicamente ya que incluso pondría en riesgo las construcciones actuales, entre las que se encuentran las propias casas consistoriales.

Retrasos

Esta actuación corre a cargo de la empresa egabrense Construcciones Pavón. Le fue adjudicada en una tercera licitación por un importe de 798.825 euros, tras renunciar las dos empresas adjudicatarias con anterioridad. En una primera ocasión rechazó el encargo la empresa jiennense Pavimentos Morales por un importe de 664.928,09 euros; en la segunda fue Tuccitana de Contratas, Tuccsaa, de la localidad jiennense de Martos, por 790.517,22. euros. Ambas alegaron que los precios de algunos de los materiales estaban constantemente fluctuando al alza.

Las obras tendrían que haber concluido el 15 de diciembre del pasado año, pues su fecha de comienzo estaba fijada el 22 de mayo del 2022, con una duración prevista de ocho meses en cinco fases.

Este proyecto incluye la mejora de la movilidad y la accesibilidad peatonales, además de la recuperación patrimonial del espacio para fomentar y potenciar su uso administrativo, económico y social acabando con la imagen de deterioro que presenta, sobre todo en su pavimento. Además, con la actuación se ganará un gran espacio público para la ciudad, tanto para su reactivación económica como para la relación interpersonal de la ciudadanía.

Se contempla además la ordenación de esta zona dando continuidad al primer tramo de la avenida José Solís, que, entre la plaza Vieja y la confluencia de las calles Santa Rosalía y Córdoba, se remodeló en el año 2013, permitiendo la eliminación de obstáculos físicos y visuales, entre otros elementos, junto a otra serie de estrategias que pasan por la escenificación de la historia de dicho enclave urbano. Eso permitirá identificar la propia historia de la plaza con lo que fue la antigua manzana del convento y el templo dominico de San Martín, desaparecido a mediados del siglo XIX como consecuencia de la política desamortizadora realizada en el reinado de Isabel II, junto a la implementación, entre otros, de arbolado y un espacio para fuente y jardines.