Crónica de la semana

¡Que empiece la yincana!

La Semana Santa da el pistoletazo de salida a las fiestas de primavera, en las que Córdoba se volcará como cada año

El Ayuntamiento inaugura la cocina de La Foggara después de emplear 8 años en la compra del menaje

Ferrán Adriá en la inauguración de la cocina de La Foggara, junto a los representantes municipales.

Ferrán Adriá en la inauguración de la cocina de La Foggara, junto a los representantes municipales. / A.J. González

Irina Marzo

Irina Marzo

Si la felicidad está en las vísperas, hoy debería ser de los mejores momentos del año. Con la primavera recién estrenada, Córdoba zarpa hacia el verano a través de una yincana de fiestas que pondrá a prueba bolsillo, piernas, estómago y riñones de propios y extraños. Comienza ya una primavera con previsiones turísticas muy optimistas, y un sector dispuesto a batir todos los récords en jornada laboral.

La Mezquita-Catedral, que celebra 40 años de su declaración como Patrimonio de la Humanidad y el sexto año como epicentro de la Semana Santa de Córdoba, tendrá también que volver a superar su particular prueba de fuego: el baño de gentes que inundará estos días el casco. Con el debate de la tasa turística todavía humeante, el alcalde Bellido se está volcando en mimar al mundo cofrade, una dedicación que le sale de manera natural como dirigente del PP que es. Solo le falta visitar al papa Francisco, peregrinación que se ha puesto de moda entre los políticos españoles de todo signo político, incluidos aquellos a los que la religiosidad no se le presupone tan natural como a los populares. Lo hizo Yolanda Díaz y esta semana le ha tocado el turno a Juanma Moreno, que acudió con regalos embalados en cajas de la Escuela de la Madera de Encinas Reales.

Pasada la Semana Santa, los turistas que vengan a Córdoba podrán disfrutar de la belleza de medio centenar de patios, además de otros tantos que abrirán sus puertas, aunque sin participar en el concurso, como los de los palacios de Orive y Viana, o los de los colegios López Diéguez, San Lorenzo o La Piedad. Los alumnos de estos centros están aprendiendo la idiosincrasia de los patios que merecieron el reconocimiento de la Unesco y también el sacrificio que entraña su cuidado, según contó el otro día el concejal Julián Urbano, que además de Festejos lleva los asuntos de decoración en Capitulares y prepara la remodelación de nuestro setentero salón de plenos.

Bellido mima al mundo cofrade y solo le falta apuntarse a la peregrinación de moda: ir a ver al Papa

Patios sí, pero lo que los visitantes que lleguen a Córdoba seguirán sin poder disfrutar es el espectáculo nocturno del Alcázar, empantanado y sin ofrecerse desde el verano. La empresa responsable del mismo, Letsgo, que paga un canon al Ayuntamiento de 102.149,01 euros y ha empezado a ofrecer sus Raíces en los Alcázares de Sevilla, sigue deshojando aquí la margarita de si acometer o no unas obras (de acuerdo, vale, imprevistas) para adaptar su montaje a los jardines. El alcalde dijo ya en septiembre que se sopesaría compensarlos por esa actuación, pero ni siquiera eso parece animar a la productora a llamar a los albañiles. Precisamente, esta semana, Capitulares ha sacado un pliego de contratación por valor de 2 millones para obras de mejora de seguridad y electricidad en el Alcázar, que ya podrían incluir la mejora que permitiera retomar el espectáculo nocturno.

También ha tardado añísimos y varios proyectos fallidos la cocina comunitaria de La Foggara, que por fin se ha inaugurado esta semana con asistencia de los representantes municipales (en la foto tipo Masterchef, ya los ven, parecen dispuestos a colocarse el delantal y afanarse en los fogones). Se trata de un proyecto original del mandato de Isabel Ambrosio en el que se han tardado 8 años de nada en comprar el menaje y las cacerolas. Nosotros somos así de puntillosos con el ajuar, pero si la cocina funciona habrá merecido la pena. Para la puesta de largo, se contó con el chef Ferrán Adriá, que alabó la gastronomía cordobesa y, en especial, el salmorejo.

Otro proyecto con la misma solera que también parece que empieza a ver la luz después de 20 años sin uso es el estadio de fútbol de San Eulogio, que el equipo de gobierno ha prometido que estará listo en 2026. Antes, con la finalización de la primera parte de los trabajos acometidos por Urbanismo, ya podrán usar el césped los niños del Campo de la Verdad para actividades escolares, y en un futuro (ponga aquí los años que estime oportunos) se culminarán las obras de la grada, el perímetro y la administración.

La semana concluye con los gerentes de las empresas municipales dándole a la calculadora para cerrar antes del 31 de marzo las cuentas de 2023. De momento, sorpresa relativa con Sadeco que cierra con 4 millones de pérdidas y el Imdeco, que lo hace con 5 millones en remanentes que bien podría invertir --lo digo por dar ideas-- en el arreglo de sus instalaciones deportivas.

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