REPORTAJE

«El voluntariado te da una lección de vida»

Cruz Roja tiene más de 1.700 jóvenes altruistas en Córdoba que dedican parte de su tiempo a colaborar con la institución humanitaria

Cruz Roja | La entidad tiene más de 1.700 voluntarios jóvenes en sus filas.

Cruz Roja | La entidad tiene más de 1.700 voluntarios jóvenes en sus filas. / CÓRDOBA

Araceli R. Arjona

Araceli R. Arjona

Cruz Roja es una de las entidades que cuenta en Córdoba con un mayor número de voluntarios. Según la institución, «la juventud cordobesa es comprometida y solidaria a juzgar por las cifras que manejamos». En Córdoba, 1.766 de las 4.705 personas (un 37 %) que regalan parte de su tiempo como voluntarias tienen 30 años o menos. El perfil mayoritario del voluntariado joven es una mujer, estudiante, que cursa estudios superiores o de grado, participa en más de un proyecto y tiene una permanencia en la organización superior a tres años.

Jimena López es una cordobesa que a sus 19 años lleva casi un año trabajando activamente con la entidad, ofreciendo cursos de español a personas inmigrantes. «Estudio Filología Inglesa en la UCO y el próximo curso haré tercero», explica, «mi interés por el voluntariado empezó cuando entré en la Universidad». Según relata, un día en clase alguien planteó que dar clases como profesor para extranjeros era una buena forma de aprender sobre la docencia y que hacerlo como voluntaria podía contribuir al mismo tiempo a ayudar en una labor social. «Se lo conté a mi madre que es trabajadora social y ella me ayudó a contactar con Cruz Roja para hacer la formación previa», asegura, «poco después, empecé a dar clases».

La experiencia ha descubierto a Jimena su verdadera vocación. «Antes de empezar, no sabía si se me daría bien, si encajaría bien en este trabajo o no, pero está siendo una experiencia muy bonita, me encanta y cada día vengo con mucha ilusión porque me permite entablar contacto con personas de diferentes nacionalidades y ayudar a inmigrantes, que tienen una vida muy complicada cuando llegan a España y para quienes no hablar el idioma supone un obstáculo más en su día a día». Durante el curso, ha compaginado su formación en la Universidad con cuatro horas de clase semanales a mujeres inmigrantes. El sacrificio que realiza para sacar adelante ambas tareas le compensa por la satisfacción que siente cuando observa los pequeños avances en las personas a las que enseña. «Mis alumnas han sido principalmente marroquíes, pero también hemos tenido a mujeres ucranianas que venían desplazadas por la guerra, de Bielorrusia y georgianas», comenta, «en clase hay distintos niveles, desde quien no sabe nada de español, quien lo chapurrea y quien no sabe ni leer ni escribir en su propio idioma y tiene que aprender español de cero, para mí es muy importante poner mi granito de arena». Jimena asegura que cuando eligió la carrera de Filología no tenía ni idea de por dónde enfocaría sus pasos. «Esto es algo que nunca se me había pasado por la cabeza, pero ahora sé que quiero dar clases de español a extranjeros y que no me importaría desplazarme fuera de Córdoba».

A nivel personal, cree que el voluntariado «sirve como un baño de realidad y una lección de vida porque ves la cantidad de dificultades a las que se enfrentan las personas inmigrantes para salir adelante y cómo con su esfuerzo son capaces de superarse y encontrar trabajo o conseguir lo que se proponen».

Cruz Roja ha decidido aprovechar la conmemoración este sábado del Día Internacional de la Juventud para reivindicar la actitud altruista de los jóvenes voluntarios con la campaña No nos conocías.

«A menudo se da una imagen negativa de la juventud, pero las personas jóvenes realizan muchas acciones de transformación social y es fundamental reconocer el papel activo que desempeñamos en la construcción de un presente y un futuro mejor», señala Paula Rivarés, directora de Cruz Roja Juventud.

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