Manuel Román se va de vacío de la Feria de Almería

El novillero Samuel Navalón ha cortado tres orejas y salido a hombros en la tarde de su debut con picadores en Almería, este viernes, en el primer festejo de la feria de la Virgen del Mar, en el que Jorge Molina ha paseado un trofeo y el cordobés Manuel Román se ha ido de vacío.

Jorge Molina ha brillado a muy buen nivel frente al buen novillo que ha abierto tarde y feria, con el que ha mostrado el clasicismo de sus formas, lo firme y asentado que se planta sobre la arena y el gusto que atesora en el toreo fundamental sobre ambas manos. Lástima que tan buena puesta en escena no ha tenido luego rúbrica con los aceros.

Nuevamente ha vuelto a dejar constancia en el cuarto Molina de por qué es uno de los novilleros más prometedores del momento, después de poner firma a otra faena de altos vuelos artísticos y rematada con mucha solvencia en la distancia corta. Ha cortado una oreja de ley.

Manuel Román no ha pasado de discreto frente a un segundo al que le ha faltado recorrido, fondo y entrega. El joven cordobés ha andado voluntarioso pero sin acabar de encontrar la tecla precisa. Tampoco ha estado acertado con la tizona. Silencio.

No ha mejorado la cosa con el quinto, novillo que pedía el mando que el joven cordobés no ha acabado de imprimir a su quehacer. Dispuesto, eso sí, ha tratado de justificarse en la corta distancia. Ha recibido una cariñosas palmas de consolación.

Samuel Navalón ha sido todo entrega frente al novillo de su debut con picadores, al que ha recibido con varios faroles de rodillas, ha quitado por gaoneras, ha iniciado faena también de hinojos y ha toreado después sobre ambas manos con más corazón que sutilezas en una faena vibrante, bien acogida por los tendidos, refrendada por bernadinas y a la primera con la espada, y premiada con dos orejas.

Ha redondado su tarde Navalón cortando una oreja más del sexto, con el que ha mostrado que, además de variedad, también sabe torear, lo que ha exhibido sobre todo manejando la mano izquierda en una labor de entidad pero sin contundencia con los aceros.