El “Informe de Progreso 2021” constituye el documento a través del cual el Gobierno de Sánchez rinde cuentas ante la ONU sobre la implementación de la Agenda 2030 en nuestro país. En dicho informe se exponen las 9 políticas palanca sobre las que se supone que pivota el desarrollo sostenible de España (agenda urbana, economía circular, cambio climático, transición energética y bla,bla,bla…), todo envuelto en un alarde de hipocresía y manipulación que se concretiza en un pin redondito pinchado en la solapa del Presidente y de su ejército de ministros/as.
La socorrida agenda 2030, anulada como herramienta de progreso y convertida por conveniencia en arma de ataque político, contempla en el objetivo 6 “Garantizar la disponibilidad de agua ”. Este objetivo tan básico, nada más leerlo, catapulta nuestra imaginación hacia países de otros continentes. Sin embargo, la incompetencia del socialismo nos embadurna de realidad para recordarnos que dentro de cuatro meses 27 municipios de la provincia de Córdoba(España) escucharan el aire comprimido en las tuberías al abrir el grifo en sus casas.
En julio de 2021 la empresa de la Diputación Provincial de Córdoba (gobernada por Psoe-Podemos) que gestiona el agua nos reunió a alcaldes/esas del norte de Córdoba para tratar el problema de la escasez de agua en el sector ganadero, pero en ningún momento se informó de la existencia de riesgo a corto plazo para el consumo humano. Este mes se nos ha vuelto a reunir para decirnos que con mucha suerte tendremos agua hasta el mes de octubre sin habernos informado previamente de que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ya había decretado el estado de emergencia del embalse en agosto de 2021.
Creo, por tanto, que en ese momento se nos debió de informar a toda la ciudadanía de las dos comarcas para fomentar una conciencia colectiva hacia el ahorro de agua. Ahora, el Gobierno de la Diputación parece ser que si pretende fomentar esa conciencia, pero con lo mejor que sabe hacer, incrementando el precio del agua.
Falta de previsión, ausencia de información y mucho cinismo político porque según la secretaria general del socialismo cordobés (Rafi Crespín), y algunos dirigentes más, la culpa del posible cierre del grifo en media provincia de Córdoba la tiene el gobierno de Juanma Moreno por no agilizar la conexión entre el pantano de La Colada y el de Sierra Boyera para que así el agua del primero pueda llegar al segundo y distribuirse por todo el territorio.
Sorprende sobremanera esta salida en tromba del socialismo provincial reclamando urgencia a Juanma Moreno para unas obras que el gobierno socialista de la Junta de Andalucía debió finalizar en 2006 y que olvidaron durante 15 años en el baúl de los recuerdos, cuando el gobierno del cambio las retomó nada más iniciar su gestión. También sorprende sobremanera que a Rafi Crespín, en sus tres años como Delegada del Gobierno Andaluz en Córdoba(2015-2017), no se le conozca acción reivindicativa alguna para que sus compañeros de la Junta cumpliesen con su obligación.
Es igualmente relevante en este tema el hecho de que la solución mejor, más rápida y definitiva para el problema pasa, según los técnicos de la propia Diputación, por realizar el trasvase desde el embalse de Puente Nuevo hacia el de Sierra Boyera, lo que permitiría disponer de agua en unos 4-5 meses mientras que la mejor previsión de disponibilidad del agua de La Colada se va a más de 2 años. Esta solución tiene un coste de 25 millones de € y depende del Gobierno de España, que de momento ha dicho ¡NO! a incluirlo en las medidas de sequía, y claro, reclamar inversiones por parte de los socialistas cordobeses a su jefe de filas no entra dentro de sus cálculos, ni es conveniente para el futuro de sus carreras políticas.
Concretando y para finalizar, podemos resumir la situación afirmando que en un territorio en el que hay 3 pantanos nos preparamos para ahogarnos de sed, que el Gobierno de Juanma Moreno ha dado la cara desde el principio ante un flagrante incumplimiento del socialismo andaluz , que para el gobierno Sanchista del desarrollo sostenible, la agenda 2030 y el reto demográfico, las comarcas de Pedroches y Guadiato no merecen 25 miserables millones que les garantice algo tan vital como es el agua y que, por tanto, en esta tierra ya sabemos lo que significa el tan cacareado PRTR(Plan de recuperación, transformación y resiliencia): RECUPERACIÓN del miedo ancestral al subdesarrollo; TRANSFORMACIÓN del norte de Córdoba en un desierto de iniciativas e inversiones y RESILIENCIA de una población demasiado maltratada.
Para nuestro consuelo, a medio plazo nos queda el buen hacer del Gobierno del cambio en Andalucía finalizando la conexión con La Colada y a corto plazo depositamos nuestra esperanza en el cielo, por tanto, recemos por un mes de mayo lluvioso.
** Alcalde de Añora y portavoz del PP en la Mancomunidad de Los Pedroches
