La Diputación ultima los trabajos que permitirán abrir la piscina cubierta del Parque Figueroa, que acumula catorce años de espera desde que empezó su construcción. El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publica hoy la apertura del periodo de información pública necesario para acometer una pequeña intervención que resta en las instalaciones en las que se empezó a actuar en el año 2006 con la colocación de la primera piedra. La Diputación sufragará los trabajos con cargo al presupuesto de obras en edificios provinciales.

Las actuaciones previas a la puesta en uso de la piscina ubicada en la avenida del Mediterráneo ya fueron aprobadas por la Diputación mediante un decreto el 5 de noviembre y el proyecto estará expuesto al público por un plazo de veinte días hábiles a contar a partir de mañana. La actuación se centrará en los dos vasos de la piscina, que se impermeabilizarán. Además, se reparará la instalación de agua fría y de agua caliente. También habrá actuaciones puntuales en el saneamiento, en la depuración, en la instalación eléctrica y en la climatización.

Cuando estas instalaciones estén totalmente terminadas y listas para abrir sus puertas, Diputación y Ayuntamiento deberán firmar un convenio para que sea gestionada por esta última administración a través del Imdeco. Esta actuación previa a la apertura está presupuestada en 211.326 euros.

El retraso en la apertura de estas instalaciones deportivas ha suscitado numerosas protestas vecinales, entre ellas, la que se produjo en marzo de este año. La construcción de la piscina es fruto de un convenio del 2004 firmado entre la Junta de Andalucía y la Diputación de Córdoba. El PP ha reivindicado en más de una ocasión su apertura.

La ejecución de la piscina, que cuando se firmó el convenio entre Junta y Diputación partía con un presupuesto de 1,9 millones, ha sufrido numerosas vicisitudes, entre ellas paralizaciones de obra, modificaciones de proyecto, adjudicaciones a distintas empresas, y reparaciones por diferentes patologías como consecuencia de todas las incidencias que ha tenido.

La última intervención en la piscina concluyó en abril del 2017, por lo que en noviembre de ese año la Junta entregó a la Diputación las instalaciones. Sin embargo, y una vez terminado el plazo de garantía, se han detectado deficiencias, cuyo arreglo ha exigido la Junta al adjudicatario de los últimos trabajos. La empresa ha subsanado algunas deficiencias pero otras no al considerar que son defectos de ejecución que no le corresponden, por lo que ha recurrido. La Diputación sufraga la actuación al no poder la Junta hasta que se resuelva el recurso.