Ayer fue la jornada del reconocimiento al esfuerzo realizado por los colectivos que año tras año montan una caseta y la ponen a disposición de los cordobeses. El Ayuntamiento procedió a la entrega en un tempranero acto (las 13.30 horas) en las distintas categorías, patrocinadas todas por Heineken. Se puso de manifiesto el hecho de que todas habían mantenido el espíritu de caseta tradicional, "inspiradas en las casas típicas cordobesas". Con similar intención, la de premiar aquellas que mantienen intacta la idea de las casetas de feria de toda la vida, la Asociación de Casetas Tradicionales procedió a entregar sus distinciones. La ganadora, por partida doble, fue la del Cristo de Gracia, que se hizo con el galardón de Mejor Caseta Tradicional no perteneciente a la asociación y con el premio del Consejo Regulador de la DO Montilla Moriles. Los responsables de la hermandad, Esteban Rojas y Juan González, recogieron el galardón. Por su parte el premio Pedro Ximénez, se concedió a título póstumo al pintor Carlos González Ripoll. Había previsto un cuarto galardón, el premio Vinagre, para quien no defendiera la imagen de la feria tradicional que, aunque el presidente de la ACT, Juan Antonio Merlos, consideraba que se lo merecía el cartel de este año, Francisco Tejada o incluso Rafael Jaén, han decidido este año dejarlo desierto.