La Comisión de Justicia del Congreso celebrará hoy la primera reunión de la ponencia para la reforma de la ley de indultos de 1870, una cita a puerta cerrada donde los grupos parlamentarios comenzarán a buscar consensos en torno a la proposición de ley que impulsó en su día el PSOE. El PP aprovechará para pedir que se prohíba el perdón a los condenados por rebelión o sedición, los cargos que se imputan a los líderes independentistas en prisión preventiva por el referéndum del 1-O.

Esta proposición de ley, registrada en agosto del 2016 y aceptada por el pleno del Congreso en septiembre del 2017, modifica la ley de reglas para el ejercicio de la gracia de indulto, que data de 1870, para prohibir que esta medida se conceda a condenados por corrupción y por delitos de violencia de género. Ahora, un año después, los grupos comenzarán a trabajar sobre la iniciativa.

Tras numerosas prórrogas, los grupos presentaron sus enmiendas en febrero, pero desde entonces no se movió nada hasta que a finales de septiembre la portavoz parlamentaria del PP, Dolors Montserrat, urgió la convocatoria de la ponencia. En concreto, dio un ultimátum de 24 horas a los socialistas para activar la modificación de la ley de indultos y así impedir que se pudiera aplicar a condenados por sedición o rebelión.