Han tenido que pasar once años para que se vuelva a hablar del Córdoba. Pero por fin ha llegado su hora. El equipo de Paco Jémez "juega como los ángeles", como dice el presidente, Carlos González, y además, consigue buenos resultados. El último precedente de euforia, la última ocasión en la que se pudo hablar de ascenso --palabra tabú en esta ciudad--, acabó precisamente en la jornada 14, precisamente la que se acaba de disputar en esta campaña. En aquella temporada 2000/01 y de la mano de Pepe Escalante, el conjunto blanquiverde coqueteó con la Primera División hasta que una racha de cuatro derrotas y un empate dio al traste con todas las ilusiones de una afición que en poco tiempo pasó de disfrutar del liderato durante dos jornadas a ocupar la zona destinada a la clase media.

El descalabro comenzó, precisamente, un 26 de noviembre. El escenario, el mítico estadio Ipurúa de Eibar. Allí, los cordobesistas encajaron un 3-0 que les cortó las alas. Como árbitro, el recordado Fidel Valle Gil, posiblemente el único colegiado que ha llegado a odiar la afición blanquiverde. Este sábado, también 26 de noviembre, los de Jémez tendrán la oportunidad de cambiar la historia en el Pedro Escartín de Guadalajara. Allí intentarán mantener el rumbo y no tener que echar la vista atrás.

En aquel equipo jugaban futbolistas con mucha historia, como Roberto Fernández, otros asentados en la categoría, como Melgar, debutantes como el compatriota de Carlos Arias, el también portero Gato Fernández --pasa por ser el jugador boliviano que ha jugado en más clubs extranjeros--, y muchos cordobeses. Hasta nueve hombres de la provincia llegaron a jugar algún partido con la camiseta blanquiverde. Los mismos que ya lo han hecho en esta.

Pero cayó en picado y el primero que pagó fue, como era costumbre en aquella época, el entrenador. Escalante fue destituido por el entonces presidente, Angel Marín, después del 2-0 en Lleida de la jornada 18. Llegó Luis Sánchez Duque, pero el equipo ya no se levantó y deambuló por la mitad de la tabla tanto con él como con Juan Verdugo, el encargado de cerrar desde el banquillo la última temporada en la que el cordobesismo ha vibrado con su equipo en Segunda.

Mejor por un punto

Ahora, Paco Jémez, empeñado en imponerse retos y superarlos, ha conseguido establecer un nuevo mejor registro en la historia reciente en la categoría de plata con sus 25 puntos, superando solo por uno el dato de Escalante. En el apartado de goles, también gana el conjunto que dirige Jémez, con 15 tantos a favor --dos más-- y 10 en contra --uno menos--. El dato que más cambia es el de la efectividad como local. En el 2000, el Córdoba ganó cinco de sus siete primeros partidos en El Arcángel, donde sustentaba su tercera posición de aquella jornada 14. En el 2011, los cordobesistas, cuartos, maquillan sus irregulares cifras en casa --tres victorias en siete encuentros-- con otras espectaculares a domicilio, donde han conseguido más de la mitad de los puntos que tienen gracias a cuatro triunfos y un empate. El sábado no debe haber ningún punto de inflexión.