Dimas Prychyslyy profundiza en la crisis de creatividad en 'Cuchara, cuchillo, tenedor'

El escritor Dimas Prychyslyy, quien fue miembro de la decimoquinta promoción de jóvenes creadores de la Fundación Antonio Gala, presentó este viernes en el antiguo convento del Corpus Christi su última novela, Cuchara, cuchillo, tenedor, una obra en la que se adentra en la crisis creativa de un escritor que no pasa por un buen momento sentimental y busca una terapia en su única amiga, a la que, a modo de confesión, relata la historia de su familia, oriunda de un país de Europa del Este. 

De origen ucraniano pero residente en España desde los siete años, Prychyslyy se adentra en este libro en temáticas como la familia, la infancia y la ruptura emocional. «Algunos han calificado esta novela como una ficción familiar, pero no sé muy bien qué es eso, creo que todas las familias son una ficción», señala el autor, que se ha movido entre la poesía y los versos a lo largo de su trayectoria. «Escribo a pares, busco un tema y hago un poemario y algo en prosa sobre ese tema, son como trabajos complementarios», subraya el escritor, que asegura que «la poesía es más costosa en cuanto que tiene que ser más condensada y en la prosa me siento más libre».

Ganador del quinto Premio Logroño de Narrativa para Jóvenes Escritores en 2019, por su libro de relatos titulado Tres en raya; el Premio Valencia Nova en su categoría de poesía en castellano por Molly House; el 25 Primaveras en 2021 y el Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla 2023, Prychyslyy considera que estos reconocimientos «no son importantes, solo son una manera publicar rápidamente y que tu novela no se ponga amarilla en un cajón».

Lo que sí fue muy importante para este joven escritor fue su paso en el año 2017 por la Fundación Gala, formando parte de la 15 promoción. «Yo creo que escribo únicamente con el pretexto de presentar los libros aquí, es una excusa para volver. Consiguieron echarme pero no consiguieron que me fuera», bromea el autor, que reconoció ayer mientras compartía la presentación de su nueva novela con Alba Carballal, también exresidente de la Fundación Gala, que para él supuso «un punto de inflexión» .