El colectivo Cantizzani Pastor reflexiona en el C3A sobre el caos de las ciudades con 'Eutropia. Tectonic Voices'

El colectivo artístico Cantizzani Pastor, formado por Luisa Pastor y Juan Cantizzani, ha presentado este martes su obra Eutropia. Tectonic Voices, fruto de una residencia becada por el C3A y el programa Arteria de DKV, la cual permanecerá expuesta al público en los estudios del centro de arte hasta el 11 de junio.

La instalación escultórica Eutropia. Tectonic Voices, reflexiona sobre la ciudad y el caos que la envuelve, pero también sobre el modo en que se proyecta en el espacio la relación con los otros y las palabras que lo inscriben. Su apariencia es la de una extraña corteza mineral extendida sobre una mesa que se presenta resonante ante el espectador y evoca el paisaje suburbial que se otea desde el avión cuando se sobrevuela cualquier megalópolis tropical.

Con sus paredes vibrantes, en esta urbe de papel donde las casas parecen carecer de techos, donde encontramos patios dentro de patios, vallas y muros, cristalizan las preocupaciones, investigaciones y diálogos que ambos artistas comparten desde hace tiempo acerca de los materiales visibles e invisibles de las ciudades.

Una ciudad de papel a partir de un libro

En la construcción de la obra se han empleado, fragmentadas y recortadas, las páginas de un libro de contabilidad de 1907, buscando así romper la comprensión diacrónica y lineal del mundo que la contabilidad persigue para negar cualquier posibilidad de lectura, de lógica.

La refundación de la polis como lugar para el encuentro es otra de las líneas de fuerza que presenta esta "topología de la ocupación sistemática del espacio que no admite calles ni intersticios para que la mirada respire", en palabras del arquitecto e investigador Curro Crespo.

La instalación combina aspectos puramente escultóricos con elementos electrónicos, propiciando estimulantes correspondencias entre lo visual y lo sonoro. Así, en la creación de la pieza se emplearon el citado papel manuscrito de contabilidad, jícaras de porcelana, soporte de madera y estructuras de hierro, pero también diversos dispositivos electromecánicos que activan o hacen resonar la obra, generando entidades sonoras que escapan en un principio a la percepción humana.

Esa oportunidad de aunar las artes visuales y las nuevas tecnologías es una de las características de la beca de residencia del C3A en colaboración con DKV y, en el caso de Cantizzani Pastor, supuso un impulso, dotado con 8.000 euros, a sus reflexiones acerca de la globalización de la metrópolis del mundo contemporáneo.

Como ha explicado la artista Luisa Pastor, "hemos llevado a cabo la deconstrucción del plan general de contabilidad para encajar la página de la economía como si fuera una matriz de casi 6.000 cajas que conforman el sentir de una ciudad". La parte sonora aportada por Juan Cantizzani, ha consistido en "trasladar el subconsciente de esa ciudad a través del sonido". Con este objetivo, el artista ha recogido las vibraciones de edificios como el Hospital Quirón o el Puente de Miraflores, las cuales se han trasladado a la obra para activar las vibraciones del papel y así "hacer perceptibles mediante frecuencias resonantes las voces de la ciudad".

La razón de ser del C3A

Como ha incidido el director del Centro de Creación Contemporánea, Juan Antonio Álvarez Reyes, "las residencias artísticas son la razón de ser del C3A" y ha recordado los seis programas de investigación y producción y varias residencias artísticas en acuerdos con organizaciones internacionales como la AAN Foundation de Pakistán o Floating Projects de Hong Kong. Asimismo, Álvarez Reyes ha recordado la reciente apertura del plazo para la nueva convocatoria de residencias artísticas.

La presentación de la instalación también ha contado con la asistencia del delegado de Cultura de la Junta, Eduardo Lucena, así como de la responsable de DKV, Mª José Valle, y la asesora y comisaria de DKV, Alicia Ventura, quienes han coincidido en la "importancia de la colaboración público y privada" para fomentar la creatividad e impulsar el arte, "por su buena repercusión en la salud mental".