Nace una nueva voz de coplas en Córdoba con Luisa Arenas

Quizá el nombre de Luisa Arenas suene familiar para quien haya frecuentado el auditorio del Jardín Botánico, el Patio de María o el Patio de la Plaza de las Tazas. En estos rincones floreados la artista suele entonar boleros, tangos o bossa nova junto a músicos como el guitarrista Baris yavuz y el contrabajista Pedro José Delgado, con los que forma el proyecto de versiones de folclore latinoamericano De la raíz a la copa, o junto al pianista Alfonso Aroca y el percusionista Manuel Luque, con quienes explora sonidos más jazz en La Bolera. Tras nueve años de trayectoria musical e incursiones en programas como Cultura en Red del Ayuntamiento de Córdoba, Arenas se ha decidido por los temas propios y su debut llega en forma de Coplas desesperadas, como ha nombrado a su primer EP.

"Cuando llegó la pandemia, pensé que lo mejor era hacer aquello que me diera la gana y a lo que nunca había dado prioridad", explica la cantante a este diario, a cerca de un proceso de tres años para un proyecto musical que ella misma califica de "un intento desesperado por saber de mí y resolver este acertijo imposible y trivial que es la vida". Irá desgranando esos sentimientos a modo de migajas para el público, con el single Quién eres como un primer adelanto. Este tema, que estará disponible en las plataformas digitales a partir del 15 de febrero, habla de encontrarse cara a cara con la parte más oscura de uno mismo y sobre cómo enfrentar esta dualidad. En ese viaje se revelan una guitarra y un piano desnudos a los que se van uniendo con elegancia contrabajo y guitarra eléctrica. Todo mecido con el timbre dulce, pero potente, de Arenas y sus claras influencias del folclore latinoamericano, desde las voces tradicionales de Chavela Vargas y Mercedes Sosa hasta referencias más actuales como Natalia Lafourcade, Carla Morrison o Silvana Estrada. "Como ellas, me gusta poner toda la carne en el asador y emocionarme yo primero para poder transmitir al público”, señala la artista, para quien “el escenario es un lugar sagrado", equiparable al "momento en el que el cura se sube al altar para dar la misa".

Consciente de los cambios acelerados que vive la industria, esta artista independiente ha querido dejar la elaboración de un álbum completo a los consagrados y optar por el formato reducido a modo de "regalo" para sus oyentes o para todo aquel que de ahora en adelante se preste a escuchar sus melodías por los rincones de Córdoba. Momento que no está lejos, pues la cantante ya prepara un concierto de presentación del EP para esta primavera. Se trata del primer paso para un camino largo que, tiene claro, quiere recorrer en compañía. "La música es un trabajo colectivo porque todo arte debe serlo", asegura, agradecida de "tener artistas maravillosos" a su alrededor.

Sus referencias vienen de latinas como Chavela Vargas, Mercedes Sosa, Carla Morrison o Natalia Lafourcade

Con una gira por Latinoamérica como un sueño todavía lejano, Luisa Arenas se centra en sacar adelante un proyecto artístico de forma autogestionada, con las complicaciones que eso supone -"las facilidades tecnológicas te permiten crear desde casa, pero el doble filo viene cuando eres tu propio mánager, productor, social media...", asegura-. Aunque a ella la acompañan Pablo Gómez, productor; Alfonso Aroca, al piano; Pedro José delgado, al contrabajo y Fletcher Ventura y Manuel Alonso a las guitarras, a los que les une un “gran agradecimiento” y “confianza” mutuos, labrado por los años y por estas coplas. 

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