Tradiciones

Fernando Luján se erige en la voz del pueblo ante la patrona de Pozoblanco en el pregón de la romería de la Virgen de Luna

El pregonero destaca en sus palabras la figura de las personas mayores en la fiesta

Fernando Luján, en un momento del pregón.

Fernando Luján, en un momento del pregón. / Rafa Sanchez Ruiz

El sacerdote pozoalbense Fernando Luján pregonó anoche en Pozoblanco la romería de la Virgen de Luna, que se celebra este domingo. Lo hizo presentando la manifestación de fe de un pueblo del que fue su voz, por ello empezó pidiéndole que le prestara sus ojos, sus oídos, su voz y su corazón.

Logró su propósito de transmitir como testigo todo lo que vivió y vio desde niño, pasando por su juventud hasta llegar a la edad adulta en torno a la fiesta de la Virgen de Luna. Luján, en este año del 75 aniversario de la puesta al culto de la actual imagen, quiso dar un papel relevante a los mayores. El sacerdote se fijó en detalles que a veces pasan desapercibidos, como la imagen de las personas más longevas cuando entra la patrona en el templo de Santa Catalina para permanecer en él hasta su regreso a su santuario de La Jara. Un momento que para el sacerdote es llamativo y del que nadie suele hacerse eco.

Quiso destacar el pregonero que lo que celebra Pozoblanco mañana lo ha recibido de sus antepasados y que los actuales pozoalbenses son garantes de ese tesoro y deben de transmitirlo. El sacerdote habló también de su vocación en un emotivo pregón con la Virgen de Luna como plena protagonista.

El pregonero fue presentado por el seminarista Francisco Fernández y contó con el acompañamiento de la coral Marcos Redondo.