La crecida del río tras la lluvia

El caudal del Guadalquivir en Fuente Palmera baja al nivel naranja

El punto de control ha estado durante un día completo en el máximo nivel de aviso por riesgo de inundación

Así discurre este domingo el río Guadalquivir a su paso por Córdoba

Manuel Murillo

Rafael Verdú

Rafael Verdú

El caudal del río Guadalquivir a su paso por la estación de control de Fuente Palmera se ha mantenido este lunes en el nivel máximo de alerta según el boletín de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir., hasta primera hora de la tarde. El cauce se ha mantenido en esa situación desde el pasado domingo, tras haber recogido el agua de las últimas y abundantes precipitaciones. 

En todo el año el Guadalquivir en este punto nunca había alcanzado este volumen de agua. Comenzó a subir a mediados de la semana pasada, gracias a las intensas lluvias de la Semana Santa. Se situó en el nivel amarillo de alerta el día 29 y siguió subiendo durante las siguientes jornadas. Tras varias horas bajando ha llegado al nivel naranja. 

El umbral máximo de alerta se coloca en los 970 metros cúbicos de caudal por segundo. A fecha de este lunes ha llegado a alcanzar los 1.220 metros cúbicos en Fuente Palmera, el único punto de la provincia con aviso rojo. El umbral máximo de alerta se coloca en los 970 metros cúbicos de caudal por segundo.

Villafranca y El Carpio

Villafranca

En El Carpio, por el contrario, el nivel de alerta es amarillo con un caudal de 590 metros cúbicos por segundo. 

El río Guadajoz también se encuentra en nivel rojo a su paso por la estación de medición de Valchillón, muy cerca ya de la capital. Presenta un caudal de 233 metros cúbicos por segundo. 

Mejora en los pantanos han comenzado a mejorar su situación gracias al agua recogida de las últimas lluvias, que han aumentado el caudal de los principales aportes de agua. Es más notorio en los embalses de pequeño y medio tamaño. 

Especialmente significativo es el caso de Sierra Boyera, el embalse del que dependen para el abastecimiento los habitantes de casi todo el norte de la provincia. De estar completamente seco hace unos meses, ahora está casi al 70 por ciento de ocupación, con unos 28 hectómetros cúbicos. Sobre el papel, esa agua es suficiente para cuatro años de consumo en las dos comarcas septentrionales, Los Pedroches y El Guadiato

El abastecimiento de Córdoba capital también está más que asegurado. Con las últimas lluvias, el Guadalmellato ha alcanzado el 90 por ciento de su capacidad teórica, cuando antes de la Semana Santa rozaba el 50 por ciento, nivel mínimo para declarar la emergencia. Tiene ahora mismo más de 130 hectómetros de agua embalsada. Mientras tanto, el embalse de refuerzo de Emacsa, San Rafael de Navallana, alcanza un nivel de 65 por ciento y más de 100 hectómetros cúbicos. La capital cordobesa gasta en torno a 20 hectómetros cúbicos cada año para el abastecimiento humano.