Fallece a los 74 años el profesor, escritor y académico Manuel Carrillo Castillo

Ha fallecido a los 74 años de edad el profesor, escritor y académico correspondiente de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba Manuel Carrillo Castillo. Natural de Almedinilla, Manuel ha sido un hombre íntegro, polifacético y volcado con la cultura de su pueblo. Es diplomado en Magisterio (Córdoba), licenciado en Psicopedagogía (Granada) y el título de Doctor en Ciencias de la Educación (Granada). Se trata este último de un trabajo de investigación que, además de su impecable factura, viene a completar aspectos educativos y formativos hasta ahora no experimentados. En el ámbito educativo, ha sido maestro de Lengua Castellana, Educación Física y Psicopedagogía y Pedagogía (Orientador de IES). Asimismo, ha sido director del Centro de Educación Primaria Ángel Carrillo, del Instituto de Educación Secundaria Carmen Pantión y del Centro del Profesorado de Priego, compatibilizando estos cargos con el de Juez de Paz de Almedinilla y la vicepresidencia del Club Unesco de Priego de Córdoba.

Su línea de investigación ha estado orientada hacia el campo de la evaluación de Centros Educativos, el cambio curricular de Andalucía (método biográfico-narrativo), la formación centrada en la escuela y en la mejora cualitativa de la Educación Secundaria y los Departamentos de Orientación. Además, ha organizado, dirigido y participado en múltiples jornadas, cursos, congresos y simposios relacionados con la formación y actualización del profesorado e Inspección educativa.

También refleja en su trayectoria profesional la edición de varios libros, numerosos artículos y una labor incansable como responsable editor del periódico local La Fuentezuela, desde 1989. Su último artículo fue del pasado 4 de diciembre. A esto hay que añadir una producción literaria exquisita que el Ayuntamiento, la Villa y sus ciudadanos tenían en consideración para su nombramiento como futuro cronista en la localidad, quien además, en su caso, está implicado de lleno en la puesta en valor de ese rico legado como recurso vital para su presente y su futuro. Se marcha una persona íntegra, casado y con dos hijos.