Una escultura de José Luis Checa para El Santuario, el regalo «al esfuerzo de un barrio»

«Al esfuerzo de un barrio». Esa es la leyenda que se puede ver bajo la estatua de José Luis Checa que los vecinos del Santuario, en compañía del alcalde y otros representantes municipales, recibieron este lunes, a modo de regalo, en su 50 aniversario, que se cumple este 9 de octubre.

Los vecinos que viven en la zona tienen muchos logros que celebrar, logros alcanzados en cinco décadas de reivindicaciones que no solo han servido para mejorar la dotación de infraestructuras o los edificios que habitan sus gentes sino para unir a los que viven en esta zona y fraguar una solidaridad y un orgullo de pertenencia que es la marca de la casa. «Yo no me voy de aquí ni aunque me toque el cupón», aseguraron varias vecinas en la fiesta. El propio alcalde, José María Bellido, que cursó estudios en uno de los colegios del barrio, destacó en su intervención ese «orgullo de barrio» de los vecinos del Santuario y les animó a seguir planteando las mejoras que ayuden a mejorar la calidad de vida de sus habitantes. 

El Santuario celebra su 50 cumpleaños con todas las obras de rehabilitación en marcha menos una

El acto de inauguración de la estatua, presentado por el periodista José Antonio Luque, ha contado con la presencia del primer presidente de la asociación vecinal El Santuario, Eduardo Riva, y la actual presidenta, Francisca Rodríguez, que coincidieron en destacar el espíritu de lucha conjunta que ha emanado de las calles del barrio en sus 50 años de historia y cómo este ha servido a muchos para «entrenarse en democracia» después de los años de la Dictadura. 

El Santuario, un barrio verde y guerrero que cumple medio siglo

El autor de la estatua, José Luis Checa, explicó que su obra, cuyo diseño fue concebido por la junta directiva de la asociación de vecinos con la ayuda del profesor Goval y el propio escultor, hace una llamada a mantener esa fuerza común, simbolizada en las llamas, que emana de las tres generaciones que componen el vecindario, los que se instalaron en él hace cincuenta años y han visto crecer a sus hijos y nietos en El Santuario, los que han ido llegando hasta ahora y constituyen el presente y los que están por venir, y de los que se espera que mantengan esa forma organizada de participación que ha servido para canalizar las reivindicaciones del barrio. 

La escultura, financiada por el Ayuntamiento de Córdoba, se sitúa además junto a un olivo "señal de la identidad andaluza" instalado por los operarios del Departamento de Jardines del Consistorio.

Y como no solo de reivindicaciones vive un barrio, este lunes se dedicó a la celebración y a la convivencia de decenas de personas que han acudido a la cita para rememorar viejos tiempos y soñar con lo que está por venir. El evento estuvo amenizado por la agrupación musical Serenata, que entonó varios temas de ayer y de hoy para la ocasión.

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