El espacio de respiro familiar en el mercadillo del Arenal recibe el premio Andalucía de la Junta

La Asociación de Comerciantes Autónomos Ambulantes de Córdoba (Comacor) ha sido distinguida por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad con el premio Andalucía + Social en su categoría de Comunidad Gitana. En esta quinta edición de los premios se reconoce el trabajo de 19 personas y entidades andaluzas en favor de la plena inclusión. El premio ha sido otorgado por el proyecto “Espacio de respiro familiar en el mercadillo de El Arenal”, desarrollado por Comacor en el pasado año 2022. La entrega del galardón tendrá lugar en el Parque de las Ciencias de Granada el próximo lunes 17 de abril.

El proyecto ha sido valorado positivamente por la Consejería por cuanto "mejora las condiciones de la actividad tradicional de venta ambulante y favorece la conciliación y el respiro familiar, poniendo a disposición de los y las menores una zona en la que pueden desarrollar relaciones sociales, de ocio y culturales", señala en una nota de prensa que también destaca que este proyecto "ha sido posible gracias a la Delegación de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba, que desde su inicio mostró su apoyo e interés por la novedosa propuesta".

Para el presidente de Comacor, Antonio Torcuato, el premio “es un reconocimiento al trabajo realizado para posibilitar la conciliación familiar en los domingos de mercadillo, una idea que la asociación ha venido madurando durante años y cuya materialización ha supuesto un hito". Según Torcuato “el proyecto entronca con nuestra razón de ser que es la lucha por mejorar las condiciones de trabajo del colectivo de vendedores ambulantes".

El Espacio de Respiro Familiar se desarrollaba entre marzo y septiembre de 2022 y acogía a una treintena de usuarios de entre 3 y 12 años, estando abierto a familias vendedoras en el mercadillo de El Arenal, en su mayoría de etnia gitana.

Torcuato ha destacado que en este espacio "se han desarrollado actividades que han servido para fomentar entre los menores valores como la solidaridad, igualdad, el respeto al medio ambiente, los hábitos saludables...” Antonio Torcuato incide en que este proyecto “ha mejorado diversos aspectos del ámbito familiar, especialmente de las vendedoras, repercutiendo en una mejor y mayor conciliación de la vida familiar, e implementando medidas que han permitido incidir en cuestiones que nos preocupan, como el uso responsable y no adictivo de las nuevas tecnologías”.