El curso escolar 2021-22 acaba de arrancar, con la incorporación de 65.358 alumnos de Infantil y Primaria este pasado viernes 10, que se completarán el próximo miércoles con los de ESO, Bachillerato y FP, hasta llenar las aulas con más de 150.000 alumnos cordobeses. No son pocos los retos que tiene por delante este curso, puestos de manifiesto tanto por los propios docentes y sus representantes sindicales como por la Administración educativa. Algunos de ellos se exponen en esta página.
La pandemia
Conseguir salir airosos y superar el covid
Comienza el tercer curso afectado por la pandemia y las medidas higiénicas y sanitarias para la prevención de contagios de coronavirus en las aulas seguirán marcando la rutina de docentes y escolares durante todo el año. Si bien la situación se afronta con mayor tranquilidad y optimismo gracias a la vacunación de los docentes y de los alumnos mayores de 12 años, quedan por vacunar los más pequeños y el peligro de contagio sigue ahí pese a la inmunización. Si el año pasado fue duro y, a pesar de todo, la incidencia de brotes en colegios e institutos fue mínima, este curso el reto es salir incluso mucho mejor, sin bajar la guardia y con las mismas medidas de seguridad. Para prevenir posibles brotes en las aulas, las autoridades educativas y sanitarias mantienen las cuatro medidas básicas de prevención: la mascarilla obligatoria para los mayores de 6 años (mientras que los menores de 6 años deberán llevarlas a la entrada y salida y en las zonas comunes de la escuela), higiene de manos, distancia de seguridad (que se reduce de 1,5 a 1,2 metros) y quedarse en casa ante el menor síntoma de covid. Se espera que sea el curso de transición a la esperada normalidad.
La bajada de natalidad
Reducir las ratios y no eliminar unidades
La bajada de la natalidad está dejando efectos devastadores en la enseñanza. En Infantil y Primaria, este curso arranca con 1.795 niños y niñas menos que el anterior. Los sindicatos, profesores y padres claman a la Administración para que este descenso de natalidad no signifique eliminar clases y cerrar colegios, sobre todo en la enseñanza pública, sino que sea el momento de bajar las ratios, es decir, el número de alumnos por clase, y ganar así en calidad educativa, con una mayor atención al alumnado. Es un reto en el que coinciden todos los sindicatos de enseñanza, pero también las asociaciones de padres, encabezadas por su federación, la FAPA Ágora.
Refuerzos docentes
Más profesores para ganar en calidad
La pandemia trajo refuerzos docentes y sindicatos, colegios e institutos no quieren perderlos, máxime cuando el covid sigue latente y las medidas sanitarias vigentes. Así, este curso se van a incorporar más de 5.300 docentes de refuerzo extraordinario en Andalucía, de los que se espera que unos 460 sean para Córdoba, aunque ese dato no lo ha confirmado aún la Administración. Esto se ha conseguido después del acuerdo con los sindicatos y patronales de la red pública y la concertada. De los 4.600 refuerzos en los centros públicos, el 25% (1.088 docentes) se consolidará en la plantilla.
Infraestructuras
La necesaria climatización
«Estamos empeñados en que las infraestructuras en los colegios de la provincia se actualicen y el alumnado y los profesores no se vean perjudicados por las inclemencias del tiempo», asegura Elena García, responsable provincial de enseñanza del sindicato mayoritario CSIF, con la que coinciden el resto de fuerzas sindicales. La delegada de Educación, Inmaculada Troncoso, aseguró al inicio de curso que, mediante el Plan de Infraestructuras Educativas del 2021 «se invertirá en los centros educativos de nuestra provincia más de 34 millones de euros, de los que cerca de 30,3 millones irán destinados a los 93 proyectos de bioclimatización». Junto a este reto, que habrá que ver cómo se concreta, este curso se espera la inauguración de un nuevo centro educativo en la capital. Se trata del nuevo instituto en Miralbaida, que la Consejería espera ver terminado en octubre. Ahora habrá que ver qué centros se adscriben a este moderno instituto y si los niños de Palmeras y Miralbaida, que tanto lo demandan, tendrán un acceso directo a sus aulas, para paliar así su gran fracaso y abandono escolar.
Impulso a la FP
La nueva ley apuesta por el modelo dual
El Gobierno de Pedro Sánchez ha aprobado el proyecto de ley de FP que consolida un único sistema de Formación Profesional Dual dirigida a estudiantes y trabajadores para facilitar itinerarios formativos a lo largo de su vida profesional, al que se destinarán 5.474,78 millones de euros para su implantación en cuatro años. Habrá que ver cómo en Andalucía la aplica el Gobierno andaluz, pero lo cierto es que la Formación Profesional, y sobre todo la Dual, es una tendencia al alza, que cada vez cuenta con más demanda de alumnos. Los títulos deben adecuarse a la demanda del mercado de trabajo.
La brecha digital
Recuperar a las zonas desfavorecidas
La brecha digital en la enseñanza se ha puesto de manifiesto durante la pandemia, mostrando que no toda la población tiene acceso a internet y a un ordenador. Con el Plan de Transformación Digital de los centros educativos, el curso pasado, la Consejería dotó a los colegios e institutos de más de 100.000 dispositivos digitales, a los que se sumarán en este curso otros 170.000 portátiles, tras el acuerdo con el Ministerio de Educación y Formación Profesional. La Junta aportará 20 millones para su financiación, según ha puesto de manifiesto la delegada de Educación.
Contra el fracaso
Ampliación del programa PROA
Inmaculada Troncoso asegura que «para luchar contra el fracaso y el abandono escolar, la Consejería mantendrá medidas como la ampliación del PROA para que tenga desarrollo de octubre a mayo, con una estimación de atención a unos 60.000 alumnos; además, habrá refuerzo de los equipos de orientación, y continuarán el Programa de Refuerzo Estival o el programa Impulsa, que irá ya por su tercera edición». Los profesores demandan más recursos en su lucha contra el absentismo escolar, aunque, con esfuerzo, se logra mantener y que no aumente.
