El alcalde de Córdoba, José María Bellido, confía en que las medidas extraordinarias para la contención del coronavirus anunciadas hoy en el Ayuntamiento de la ciudad solo tengan que estar vigentes hasta el 31 de marzo y que no se vea afectada la Semana Santa en la ciudad, si bien algunas hermandades se han visto obligadas de momento a suspender los ensayos de sus costaleros. "Las medidas están aprobadas hasta el 31 de marzo, esperemos que solo sea hasta ese momento", ha dicho a preguntas de los periodistas, subrayando que el evento religioso "queda lejos y más allá del calendario de estas medidas". Los que sí podrían tener problemas para celebrarse son los vía crucis previos a la Semana Santa. El alcalde ha dicho, refiriéndose en general a los actos en la vía pública, que no se revocarán las autorizaciones que ya se hayan concedido, pero que será responsabilidad de los organizadores celebrar o no los actos.

Lo que sí ha pedido el regidor cordobés al resto de la ciudad es que tome medidas similares a las adoptadas hoy por el Ayuntamiento y el resto de administraciones a indicación de las directrices de las autoridades sanitarias, al tiempo que ha querido lanzar un mensaje de confianza y tranquilidad a la sociedad cordobesa.

"No podemos prohibir nada, porque no nos corresponde, pero hacemos un llamamiento a que se sea responsable y salvo aquello que sea estrictamente necesario o no comporte ningún riesgo, se eviten todas las demás actividades y se actúe de la misma forma que las administraciones", ha dicho el regidor cordobés. En este sentido, José María Bellido ha explicado que las medidas adoptadas por el Ayuntamiento de Córdoba han ido encaminadas a limitar toda la actividad extraordinaria, mantener y garantizar todos los servicios públicos de la ciudad, cerrar aquellos espacios donde acude población de riesgo, como los mayores, y límitar el aforo del resto de espacios municipales.