Los dos bomberos cordobeses que acudieron a Haití como parte de la Unidad Canina de Rescate y que sacaron a dos personas de entre los escombros han asegurado hoy que el terremoto que sacudió a la isla caribeña ha sido "el golpe de gracia" para este país.

Antonio García y Fernando Medina son los dos bomberos del Consorcio de Bomberos de la Diputación de Córdoba que llegaron a Haití 39 horas después del seísmo, entre los ocho primeros especialistas españoles que acudieron al país caribeño para colaborar en las tareas de rescate.

Allí encontraron un país arrasado por los temblores de tierra, pero recuerdan que, con anterioridad, Haití ya era uno de los países más pobres del planeta, por lo que consideran que el terremoto "ha sido el golpe de gracia" para la isla, en la que, según las cifras de la ONU, el terremoto ha causado 112.250 muertos y 194.000 heridos.

Sin embargo, por encima de la destrucción, los dos bomberos han querido resaltar, sobre todo, la colaboración que han recibido por parte de los supervivientes al terremoto y, en cambio, han negado que se percibiera en el país un clima de inseguridad, porque "la población siempre nos ha ayudado".

En cambio, han explicado que debían de ser selectivos a la hora de aceptar esta ayuda de los haitianos, pues "si quienes ofrecen su colaboración no están preparados, pueden poner en riesgo sus vidas".

Un país donde aún falta mucho que hacer

Precisamente su preparación para actuar en emergencias humanitarias similares a las del terremoto de Haití es lo que ha permitido que salvaran la vida de dos personas que estaban bajo los cascotes de Puerto Príncipe.

"No ha sido fruto de la casualidad", ha asegurado Antonio García.

Sin embargo, estos dos bomberos que regresaron el domingo a España después de estar once días en Haití donde pasaron seis días incomunicados, han alertado de que "aún está todo por andar" en el país caribeño, porque aún quedan las labores de reconstrucción.

También han lamentado que, debido al mal estado de las carreteras haitianas y a la falta de combustible, la ayuda humanitaria sólo ha llegado, en un primer momento, a la capital, mientras que los núcleos alejados de la capital han tardado más tiempo en contar con la colaboración internacional.

Estos dos bomberos cordobeses forman parte de la Unidad Canina de Rescate, creada en 2005 y que ya ha participado en tareas de emergencia en Pakistán y Perú.