'Un corte que no sangra'. Autor: José Luis Gómez Toré. Edita: Trea. Gijón, 2015Ese corte invisible que es existir, ser consciente de lo que sucede alrededor y cómo acaba por impactar sobre uno mismo, ese asombro continuo ante lo mínimo que de pronto se vuelve, dentro del poema, relevante, puede constituirse como uno de esos elementos claves que que dan cuerpo a este poemario de Gómez Toré. Desde el primer poema --canto a la belleza-- Toré cuida el lenguaje como esa riqueza instrumental que posibilita, al menos, la intención de definir un espacio, un territorio --no físico-- en el que la palabra va apuntando: "La música hace dudar al tiempo..." y ese lenguaje no es el del silencio, aunque se origine desde el mismo, ya que la palabra busca el contacto, saberse oída en un canto vital y necesario. Observar, sentir, pero sin ese arañazo, sin ese pequeño corte que de forma visible fluye, nada acaba por trascender: "y ya pasa / y deja apenas nada, / un arañazo, / una herida transparente... ". El sentido lo provoca u origina ese encuentro, esa percepción de una belleza huidiza de la voz que trata de "sostener un instante" y de dotarlo de visibilidad mediante el verso. "Somos, hablamos, adiministramos, buscábamos..." el yo queda relegado a un plano más oculto, la mirada pone su objetivo en lo de fuera, desprendiéndose del posible exceso del yo, haciendo que se diluya en el nosotros, formando parte de un todo.

Antonio Luis Ginés